Capítulo 18

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Las charlas de sus compañeros inundaban el coche.

Innie intervenía pocas veces, solo cuando alguien le preguntaba algo directamente, pues, a decir verdad, solo conocía de vista a los que viajaban con ella. Así que se sentía un poco cohibida.

Durante el camino, su chat grupal se fué llenando de mensajes.

Felix.

“OMG!, cuándo puedas cuéntanos todos los detalles. ¡Esto es grandioso, noona, lo mereces!”

Minho

“¡¿QUÉ TÚ QUÉ?!, FELICIDADES NOONA, ¿VES LAS MAYÚSCULAS?, ASÍ DE FELIZ ESTOY POR TI.”

Changbin

“¡¿Esto es real?!, Innie, lo lograste :’) disfrútalo mucho. PD: ¿Me consigues un autógrafo de Nayeon noona?”


Mina

“Mi niña, ¡Es una oportunidad maravillosa!, estoy orgullosa de ti. Cuídate mucho y demuestra de lo que eres capaz. Escríbeme cuando tengas tiempo.
Bokie y yo te amamos mucho”

Sonrió ante las respuestas de sus amigos y hermana.

Estaban llegando a la locación así que tecleó dos rápidas respuestas, una para su grupo de amigos y otra para Mina.

“Gracias, chicos. ¡Estoy muerta de nervios y emoción!, ya llegamos a nuestro destino, les escribo después. Ya quiero contarles todo:)”

“Muchas gracias, Unnie. Yo también las amo. Te escribo cuando pueda”.

El auto se detuvo frente a uno de los edificios más altos de Seúl, todos tomaron sus cosas e Innie los siguió.

Para su sorpresa, subieron hasta la inmensa azotea, en dónde una increíble escenografía ya estaba montada.

Habían vigas de metal que formaban un cuadro grande sobre sus cabezas, y que sostenía reflectores que estaban encendidos, con luces de gran alcance apuntando en diferentes direcciones.

Innie abrió la boca de la impresión, había maquillado a bailarines en algunos programas de música, pero nunca había estado presente en ninguna filmación de MV.

En cuanto llegó, activó su modo profesional e hizo un excelente trabajo al no ponerse a chillar como una niñita cuando le asignaron maquillar a Im Nayeon.

Aunque no tuvo oportunidad de interactuar mucho con las miembros del girl group, todas fueron muy amables cuando las saludó y se presentó con ellas.

La tarde dió paso a la ajetreada noche, en dónde estuvo muy pendiente cuidando cada detalle para que Nayeon luciera siempre perfecta.

Durante un momento, pasada la media noche, les dieron un descanso a todos, para comer un refrigerio y descansar.

Innie no tenía hambre debido a toda la adrenalina de las últimas horas, así que optó por acercarse a la orilla del techo y recargar sus brazos sobre el muro que protegía el borde del tejado.

El clima era fresco y el cielo se veía precioso. A veces, debido a la contaminación de la ciudad, era extraño ver las estrellas.

Pero esa noche, un cielo cubierto de luceros brillantes se ceñía sobre ella.

Cerró los ojos y respiró profundo.

Una sensación familiar fué llegando a ella de a poco.

Por qué este cielo, tan brillante, tan hermoso…tan lejano. Le recordaba mucho a él.

El rostro de Hyunjin apareció en su mente.

Abrió los ojos de golpe, su corazón hizo un extraño movimiento dentro de su pecho.

Algunas veces, cuando veía algo hermoso, comía algo delicioso, o le pasaba algo extraordinario, la abrumaban las ganas de querer compartir esos momentos con él.

Y a pesar de que ahora, el recuerdo de Hyunjin cada vez venía a ella con menos insistencia, cuando lo hacía, era…demoledor.

Habían pasado cuatro meses en los que no había hablado con él en absoluto y cada día había sido verdaderamente difícil solo verlo de lejos y fingir que nada había pasado entre ellos.

Después de verlo besar a Do-Yun, decidió que lo mejor era mantenerse alejada, ella no sabía siquiera, si ellos estaban saliendo, se imaginaba que tal vez sí, que tal vez Hyunjin y Do-Yun habían encontrado alguna manera de hacer funcionar lo suyo, aún si la chica había sido eliminada de JYP durante las pruebas anteriores.

Cuando pensaba en ello, un nudo se apretaba en su pecho, y se sentía como una estúpida.

Porque aún lo entrañaba, completa y absolutamente.

Cuando la sensación en su pecho empezó a ir en crescendo, sacó su teléfono y abrió su chat con Hyunjin, viendo todos los mensajes sin recibir que ella le había enviado.

Trataba de no hacerlo a menudo, sin embargo, algunas veces, cuando lo extrañaba tanto que sentía que el sentimiento la ahogaría, le enviaba un mensaje.

No sabía por qué razón, pero ahí, en la cima del edificio, con la vista de Seúl iluminado bajo ella y el cielo vibrante sobre su cabeza… decidió aflojar el nudo de su corazón, que no la dejaba ser por completo feliz.

Hyunjin aún la tenía bloqueada y ella sabía que quizás él nunca leería todo lo que ella le había enviado, aunque a decir verdad, en su interior deseaba que él nunca se enterara, pues se moriría de vergüenza si él se daba cuenta de que aún sentía un mundo de cosas por él…qué muy dentro de ella, había estado esperando por algo, que,  claramente no sucedería por más que lo deseara.

Cuidadosamente, tomó una foto de la vista frente a ella y escribió un mensaje más,  con todo su cuerpo temblando y un doloroso nudo creciendo en su garganta, mientras se prometía a sí misma que sería el último.

Se limpió las lágrimas que ni siquiera se había dado cuenta que estaba derramando.

Y presionó el botón de enviar.

Sabía que sería difícil, que llevaría aún más tiempo sanar a su corazón. Sin embargo, decidió que era hora de avanzar, de avanzar de verdad.

Era hora de dejar de condenarse por sus decisiones pasadas y de dejar de atormentarse por el incierto futuro.

Una vez, Mina le había dicho, que amar a alguien a veces significaba dejarlos ir.

En ese entonces, sus palabras habían movido algo dentro de ella, pero, ahora, lo entendía.

Por fin lo entendía.

Así que, viendo el precioso cielo y emitiendo una sonrisa triste…Amó a Hyunjin con todo su corazón.

With you || HyunInDonde viven las historias. Descúbrelo ahora