un secreto al descubierto

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Hola buenos días, tardes o noches, no he podido escribir debido a la escuela y citas con el médico con mi mamá problemas vecinales, lo que llevo a que dejará mis historias, por un tiempo. Se que lo he tenido abandonados, pero ya estos de regreso, por lo que estaré actualizando el amor debe ser especial y nunca pensé que nos enamoraríamos, tengo otra historia en mente el cual ya lleva tres capítulos, sin embargo, me centrare en las dos obras que se están publicando actualmente. Por último, quiero agradecerles a los lectores que todavía se interesan en las historias que escribo, en especial alex-sanuwu y Akira_kamado, quienes han estado muy al pendiente. Muchas gracias.

Sin más por decir los dejo con la lectura, puede que contenga errores ortográficos y gramaticales.

Kaito estaba cansado de interpretar a Kudo, su psique mental esta casi al borde de presenciar tanto asesinato, definitivamente él no estaba hecho para esto, un suspiro se le escapa y un Shinichi a los lejos lo despierta. Voltea, a unos pasos se encontraba Ran Mouri, con una gran sonrisa, por un breve instante la imagen de su amiga de la infancia apareció y sintió una gran punzada en su corazón, el parecido con su amiga de la infancia era sorprendente, si el no fuera el maestro del disfraz, no notaria la diferencia.

-Hola Ran, como estás, perdón por no llamarte, pero...

Ran simplemente lo abrazo. -Shinichi, que pasa te he dotado diferente, no estas metido en algo malo verdad.

Kaito, no sabía que decir, estaba claro que esta situación tenía fecha de caducidad y tenían que arreglarlo cuanto antes. Iba hablar cuando siente su celular vibrar, por lo que aleja a Mouri, en su pantalla aparece kudo, Ran trata de mirar quien es, pero shinichiblo quita.

-Tengo que irme, hablaremos más tarde, le da un beso en la mejilla. Y se va corriendo

-Que estas escondiéndome Shinichi, ti. La karateca se va, convencidas que este Shinichi es diferente y a las alguien conocido.

Mientras tanto en la mansión Kudo, dos mujeres se miraban cautelosas, Shinichi se había escapado con la excusa de ir al baño, para poder llamarle al ladrón él no quería enfrentar a esas temibles mujeres y explicarle solo su estado.

Abre la puerta del baño y se asusta al ver a su padre con un semblante de que le explique, desviando su mirada a su vientre abultado. El sonido de la puerta alerta a ambos por lo que van rápido, bueno solo Yusaku kudo, Shinichi aunque quisiera le sería imposible.

Kaito llama a kudo, se sorprende al ver a un hombre que tiene enfrente. -Padre.

-Llegaste, tenemos visitas. Shinichi no sabía cómo llamarlo, pues no conocía su nombre.

Kaito por su parte, no sale de su asombro, por el hombre que está frente a él, mirándolo detenidamente, el tirón que le hace Shinichi para llevarlo a un lugar aparte lo hace reaccionar y lo sigue.

-Oye, tu madre vino aquí, con un montón de cosas y para empeorar las cosas mis padres vinieron. Estoy empezando a estresarme y eso no es bueno para él bebe, así que tu...

-Shinichi respira profundo relájate, vuelve a respirar. Todo saldrá bien, pero, antes que nada. Se que esta no es la mejor manera de presentarme. Kaito extiende su mano y el detective no entiende que es lo que está haciendo.

-Es un gusto conocerte Kudo Shinichi, Me llamo Kuroba Kaito, sé que la situación en este momento no fue la mejor y que ambos tenemos a personas que amamos, sin embargo, si llegara, el día que eso cambie. Quiero agradecerte por ser el padre de mi hijo.

Shinichi no sabía cómo reaccionar a eso, en los últimos meses su corazón estaba actuando extraño. Pero decidió ignorarlo, todavía quería regresar con Ran.

Nunca pensamos que nos enamorariamosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora