𝐌𝐞𝐮 𝐚𝐦𝐨𝐫 - João Felix

04

~Luciana

João me había invitado a una cena después del partido, ya que habían ganado. Igual, como que no me había "invitado" porque me dijeron los demás chicos también de ir, solo que él fue el que me preguntó si iba a ir o si quería ir con él.

Ya estábamos en casa con Gavi, mejor dicho en la casa de Gavi. Nos bajamos del auto y fuimos rápido a la casa por el poco tiempo que nos quedaba. Encima, este tiene la casa en la loma donde cagó el conejo, así que nos quedaba menos tiempo. Solo teníamos 30 minutos y estábamos justo a 20-25 minutos de donde sería la cena, así que apenas entramos casi corriendo fuimos para nuestras piezas. Yo me puse un vestido sin hombros negro, algo sencillo, solo iban los del Barça, así que no me hacía problemas.

Me maquillé rápido y bajé. Pablo estaba sentado en el sillón con el celular esperándome. ¿Cómo llegó a prepararse tan rápido este?

– ¡Uh, ochenta años! – habló él desde el sillón mirándome.

– Vos no sabes lo que es cambiarte y maquillarte, ¿no? – le pregunté. Habla por hablar el boludo ese.

– Bueno, vamos, que llegamos tarde, si no.

Luego de eso, nos subimos al auto y a Pablo le tocó poner música. Puso "Columbia" de Quevedo. Amo esa canción, me da unas vibras a verano. También con la que hizo con Biza, esa me trae vibras al Mundial del 2022 y al verano en Argentina. Fue lo mejor. Aparte, ahí lo conocí al que puso esa canción, así que es más especial para mí, pero no importa. Volvamos al tema. No sé cómo, pero llegamos más rápido. Ya estaban Lamine, Pedri, João y Araujo. Siempre, pero siempre llegaban temprano, menos João, que él siempre llegaba tarde a los estrenos.

Estaban lindos todos, pero más João. Bien, bien. Lo conocí cuando jugaba con mi hermano en el Chelsea. Igualmente, solo crucé dos palabras con él, así que solo lo conocía de vista. Por eso me habló un poco más, como si fuéramos amigos. Él mismo tenía un jean claro con una camisa, le quedaba muy bien.

Entramos y nos sentamos en nuestros lugares.

– ¡Hola chicos! ¿Cómo están después de ganar? – pregunté saludándolos.

– ¡Hola chavales! ¿Cómo están? – les habló Gavi, casi preguntando lo mismo que yo. Es un recopión.

– Hola Luci y Gavi, bien, por lo menos yo – respondió Lamine. Con él no me estaba hablando mucho, pero me cayó bien.

– ¡Hola Lulú y también a Gavi! – saludó Pedri, a lo que Gavi se hizo el ofendido.

– Eh, ¿cómo que "también a Gavi"? Ya me están cambiando, eh – habló ofendido Pablo, obviamente de broma, creo.

– Jódete, me aman más a mí que a vos. Bancatela – me miraron con una cara rara por la última palabra que dije. Ahí me acordé que ellos son españoles. Tendría que dejar de hablar así, pero no quiero.

– Bueno, hola chicos. ¿Cómo están? – nos preguntó João, con el acento portugués que tiene. Lo amo. Eh, estoy hablando del acento.

– Bien, bien, João – respondí con una sonrisa, a lo que también lo hizo Pablo.