parte 12

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Me levanto temprano con un nudo en la garganta. La cabeza me va a mil y no puedo respirar. La fecha me persigue por todos lados, en el celular, en el calendario arriba de la mesa del hotel y hasta en la tele. Son las 4 de la mañana y casi se me había pasado por alto la importancia que tenía este día. Mi aniversario con James.

Respiro profundo e intento ordenar las ideas en mi cabeza. Saco mi cuaderno y una lapicera, y anoto lo que se me viene a la mente. Las lágrimas inundan mis ojos y cada vez se me hace más difícil enfocar la vista. Hasta que se me viene una idea brillante.
LOML sería el título de la canción y la letra giraría en torno a mi relación con James. Como pasó de ser el amor de mi vida, a la pérdida de mi vida.

Pasó horas y horas escribiendo, cómo él me había hablado de casarnos, de tener una familia y de un día para el otro me encuentro deseando no haberlo conocido. Fue una despedida muy blanda, comparada con lo que vivimos en nuestra relación de casi 5 años, y eso me pone furiosa y triste.
Todo lo que pasamos juntos se me aparece como flashes incesables y me duele el corazón como si le hubiesen clavado una daga en el centro. Entiendo que él ya está en otra etapa de su vida, ya que hay una diferencia de edad entre nosotros, y yo recién arranco con mi carrera. Pero lo podríamos haber trabajado y él sólo decidió escapar de la situación. Un cobarde que decía llamarse un león.

4 horas demoré en terminar la canción, y para ese momento se la mando a mi productor y mánager a ver qué les parece. Me preparo lo más rápido posible porque hoy, viernes, es el último ensayo antes del show de mañana.
Cuando llego al estadio, mis colegas y amigos ya están esperándome para empezar.

-Che Sabri, mañana después del show tenemos ganas de salir de joda, ¿te sumas?- me pregunta Emi, una de mis bailarinas, y los demás me sonríen.

-Obvio dale, ¿puedo invitar a mas personas?- tengo a varios en mente pero quiero tener el okay de ellos.

-Pero siii, mientras más seamos mejor- dice Cristian aplaudiendo -¿Le vas a decir a Julián?- pone cara de pícaro y los demás lo apoyan.

-Si, pero no por lo que están pensando, es mi mejor amigo nada más. Aparte, lo voy a invitar a Joao Felix, me estoy hablando con él hace rato- comento el chisme y todos suspiran, unos emocionados y otros desilusionados.

-Loca, vos y Julián harían alta pareja, dale una oportunidad- vuelve a hablar Cristian -Se re nota que te tiene ganas y vos también a él, inconscientemente.

-Que noooo, dejen de decir boludeces, no me gusta Julián y yo a él tampoco, amistad es lo único que tenemos. Ahora basta de mi y arranquemos a ensayar- pongo un poco de orden y los demás me hacen caso inmediatamente.

.  .  .  .  .

Estuvimos todo el día sin parar, probando el sonido, las luces, las coreografías, e incluso estuve cantando demasiado. Cuando terminamos, agarro mi celular y veo varias llamadas perdidas de Juli, así que lo llamo y enseguida responde.

-Sabri, ¿estás bien?- pregunta exaltado.

-Juli, si, estaba ensayando. ¿Pasó algo?- ahora pregunto yo medio preocupada.

-Ah, no nada, es que tenia el día libre y pensé en invitarte a hacer algo. Te llamé muchas veces y como no respondías me asusté- me resulta tierno y súper atento de su parte, y a la vez me siento culpable por no haber estado disponible para él.

-Ay perdón amigo, podes venir al hotel si queres y comemos algo- le ofrezco este plan casero e improvisado.

-Bueno dale, tipo 21 estoy por ahí. Chau Sabri- él corta y yo salgo disparada para el hotel. Son las 20hs y tengo que bañarme, prepararme, encargarme de la comida y de acomodar la habitación.

Como era de esperar, no llegué a encargarme de la comida, pero no hubo problema ya que Juli compró una pizza en el camino y me sorprendió con chocolates de postre.
Lo invito a pasar a mi habitación del hotel y tomo las pizzas para apoyarlas sobre la mesa. Julián observa lo grande que es el lugar y chifla.

-Bastante lujosa y grande para vos sola- dice aún mirando los mínimos detalles.

-En mi defensa, tenía planeado que James me viniera a visitar, pero pasaron cosas- mi tono de voz baja y otra vez empiezo a sentirme mal. Él lo nota y se acerca.

-Está bien Sabri, estoy acá para vos siempre- me abraza y yo no lo puedo contener más. Las lágrimas corren por mis mejillas y mojan la remera de Juli.

-Pasa que hoy cumpliríamos 5 años y siento que me afecta un montón- confieso entrecortadamente.

-Mira, si queres podemos ver una peli en silencio, solo los dos tranquilos. Así te pones de mejor humor y mientras comemos la pizza y los chocolates. ¿Te parece?- yo asiento limpiándome las lágrimas y me siento en el sillón mientras él acomoda el resto de las cosas. -¿Viste "Quien mierda son los Millers?"?

-El nombre me suena pero creo que no la vi- respondí sinceramente mientras abro la caja de la pizza.

-Perfecto, es una de mis favoritas y creo que te va a gustar mucho- agarra el control y pone Netflix. Busca la película y le da play enseguida.

La paso súper bien ya que es una película de comedia y yo amo las comedias. Comimos toda la pizza y todos los chocolates antes de que termine.
Luego de todo lo que hice hoy, me cae el cansancio y se me empiezan a cerrar los ojos. Lucho contra el deseo de dormir para poder terminar la película y me es casi imposible. Por suerte, en 5 minutos llegamos al final y pudimos apagar la televisión.
Me doy cuenta de la hora, 22:50 y se me viene una idea a la cabeza.

-Juli, ¿no queres quedarte a dormir? Es muy tarde para que te vuelvas solo al alojamiento- le propongo y veo cómo Julián se pone nervioso.

-Emmm, si no te molesta me quedo, pero duermo acá en el sillón- aclara sonrojándose.

-Pero mira si vas a dormir en el sillón, salame. Sos mi amigo y no voy a permitir eso, aparte la cama es bastante grande para los dos- le digo intentarlo convencerlo.

-Bueno, está bien- dice levantándose y yo agarro mi pijama para ir a cambiarme al baño. Cuando salgo me encuentro con una imagen sorprendente, Julián en cuero. Evito mirarlo directamente pero me gana la curiosidad y entonces lo observo. Él se da cuenta y se sonroja un poco -¿Te molesta si duermo así?- su pregunta me toma por sorpresa pero niego con la cabeza restándole importancia.

Ambos nos acostamos y nos deseamos las buenas noches. Apago la luz y rápidamente caigo rendida ante el sueño.

The Alchemy - Julián Alvarez Donde viven las historias. Descúbrelo ahora