CAPÍTULO 256

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“No esperaba que el Gran Rey hablara el idioma de Gran Yan tan bien.” Un viejo príncipe levantó el pulgar en señal de elogio.

Otros príncipes también asintieron, y la sala de la terraza se llenó de bullicio, con conversaciones y risas.

En ese momento, una voz clara, fuerte y agradable se oyó desde afuera.

“¡Qué animado! ¡Hay tanta gente aquí!”

Ai Qing con pasos ágiles, entró en la terraza rodeado de eunucos, guardias y sirvientes de la mansión real.

Yan se quedó estupefacto, no esperaba ver a Ai Qing en ese momento, Su copa de vino se movió y el líquido mojó sus dedos, lo que lo despertó de inmediato, y se levantó apresuradamente para recibir al Gran Emperador.

"¡No hace falta, no hace falta!"Ai Qing se rió y sujetó la muñeca de su hermano para ahorrarle la ceremonia, entonces el Emperador miró a Usman y le dijo: "Majestad, tengo mucho trabajo que hacer, y no puedo escaparme en este momento, así que le pedí a mi hermano que fuera a darle la bienvenida, ¡así que no se enfade conmigo!"

"Cómo podría estarlo, con el hermoso vino, el hermoso paisaje, y rodeado de bellezas, este Rey se siente más que bienvenido, estoy más que feliz".Con esas palabras de Usman, todos pensaron que las bellezas eran las doncellas que estaban al servicio.

Sí, estas doncellas fueron cuidadosamente preparadas por Yan, y todas eran hermosas mujeres en la flor de la vida. Pero sólo el propio Usman sabe que cuando se refiere a "bellezas", se refiere tanto al Príncipe de Yonghe, Yan, como al Emperador.

El Emperador del Gran Yan era aún más delicado y apuesto de lo que él esperaba, ¿cómo podía ser tan exquisito ese rostro del tamaño de la palma de la mano? Sus ojos eran grandes y brillantes, con un brillo que le daba una sensación de asombro.

Este emperador también es demasiado fácil de llevar, frente a los príncipes, parece que no hay mucha autoridad. Sabía que el Gran Imperio Yan era el primero del mundo dominado por el honor y el poder, y que el hijo del cielo fuera tan amable y relajado era algo que Usman no había previsto.

Como Saha no podía acercarse al emperador a menudo, la información al respecto se limitaba a sus logros y a su gran afecto por su hermano..

En cuanto a su apariencia, Saha también había mencionado brevemente algo, como “joven y apuesto”.

Usman rn ese momento pensaba que Saha había dicho muy poco; dado el hermoso aspecto del emperador de Gran Yan, describirlo con un extenso elogio no sería excesivo.

Por supuesto, Usman también pensaba que tal vez estaba demasiado obsesionado con la apariencia física. Cuanto más hermoso era alguien, más deseaba conocer su interior, y una vez que lo conocía, su interés se desvanecía por completo. Incluso si tuviera que matarlo, no sentiría ningún remordimiento.

Ante los saludos de Ai Qing, Usman sonrió, dijo algunas palabras de cortesía y agradeció la cálida recepción de Yan, entre otras cosas.

Yan, con sus ojos oscuros, solo miraba a Ai Qing. No lo había visto durante varios días y parecía un poco más gordo; llevaba ropa suelta y su rostro seguía siendo delgado, sin engordar.

Pensando en la cara gorda y roja de Ai Qing cuando era niño, y en cómo trabajaba tan duro día y noche después de convertirse en emperador que cayó enfermo, y en cómo siempre le ponía las cosas difíciles, el corazón de Yan se sintió muy mal.

Después de que Ai Qing y Usman brindaran el uno por el otro, Ai Qing también ordenó que le trajeran algunos regalos, incluyendo un tintero de piedra turquesa, tinta de diez colores, un soporte para pinceles de jade, y otros tesoros dignos de un erudito.

[ADVERSARIO] PARTE 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora