CAPÍTULO 216

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Por él, renunció a unirse a la familia de su abuelo y su abuela, y tal vez hablando
todavía podría ser restaurada a su condición de joven dama.

Sin embargo, ella prefería ser una vaca y un caballo(1)en la residencia del Príncipe, aunque fuera menospreciada y agraviada por el Príncipe Jing, no abandonaría al General Jing.

Este sentimiento es demasiado ardiente y, a medida que pasa el tiempo, resulta cada vez más imposible de ocultar.

Entonces, incluso la dama ennoblecida se dio cuenta y tuvo la intención de emparejarlos, pero el general se negó a casarse con ella ...... incluso a tomarla como concubina.

Tian Ya Jing siempre pensó que se debía a su bajo estatus o que había hecho algo inapropiado, así que se arregló cuidadosamente y estudió mucho, intentando ser como las damas nobles de la ciudad imperial. ¿Cómo iba a saber que su oponente sería el actual emperador?

Esto... ¡fue como rayo caído del cielo!

Ella había sobrevivido a la muerte y pensaba que nunca habría nada más triste que la dolorosa pérdida de un ser querido en esta vida.

Pensó que ya había sufrido bastante en el mundo humano y que no debía someterse de nuevo al tormento de Dios.

Unido a lo que el general Song acababa de decir, la llenó con el pensamiento de que
¡la persona amada del General Jing era ella!

Del cielo al infierno, en sólo una rápida mirada, su corazón se rompió......

"¿Señorita? ¿Qué le pasa?" Una sirvienta vino por agua y se quedó estupefacta al ver a Tian Ya Jing postrada junto al depósito de agua, con la ropa y la cara  mojadas sin saber si era agua o lágrimas, ¡pero todo su cuerpo sentía un dolor incontrolable!

Tian Ya Jing levantó la mano débilmente, como para pedirle a la persona que se callara, pero no pudo evitar que las lágrimas se derramaran por su rostro.

"¡La señorita se ha caído!" El suelo estaba muy resbaladizo, así la criada penso que debió haberse golpeado con algo, por eso le dolía tanto, asi que levantó a Tian Ya Jing y la llevó a la leñera para que descansara.

Al enterarse, llegó la dama ennoblecida y preguntó repetidamente a sus criados qué habían hecho. ¿Cómo habían podido dejarla caer así? También dijo que, si molestaban al emperador, no bastaría con cortarle varias cabezas.

Por supuesto, esto es para asustar a la gente, el emperador es benévolo, ¿cómo podría querer cortarles la cabeza solo por esta pequeña cosa?

Pero después de ser reprendidos así, las sirvientas y los sirvientes se calmaron y dejaron de gritar por todas partes.

La dama ennoblecida preguntó suavemente a Tian Ya Jing, que estaba sentada en una silla circular:  "Mi querida niña, ¿dónde te duele?"

Tian Ya Jing  no dijo una palabra, sólo se tocó el pecho izquierdo con expresión triste.

"¿Te duele el corazón? ¿Te duele mucho?" la ennoblecida dama frunció el ceño y dijo preocupada: "¿ Te has golpeado en el pecho?, oh, espero que no te hayas roto un hueso ..."

En ese momento, el mayordomo entró para informar que el emperador regresaba al palacio, por lo que vino a informarle.

"Señora, el general Song también dijo que el emperador dijo que se iba de gira con ropa de plebeyo, por lo que no tiene que salir para despedirlo" El mayordomo se inclinó de nuevo y dijo.

"¡Cómo puede ser! Su Majestad puede decir eso, pero nosotros no podemos hacerlo, es demasiado descortés". La ennoblecida dama hizo que su criada personal enderezara su aspecto. Tian Ya Jing seguía sin aliento, su rostro pálido como si hubiera sufrido una gran ofensa.

[ADVERSARIO] PARTE 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora