Después de la luna de miel, Hermione y Snape regresaron a Hogwarts, donde fueron recibidos con cariño por sus amigos y colegas.
Snape volvió a su puesto de profesor de pociones, pero ahora era un hombre más feliz y relajado. Hermione continuó su trabajo en la biblioteca, pero ahora era la señora Snape.
Juntos, fueron una pareja respetada y admirada en Hogwarts. Todos sabían que Snape había cambiado gracias al amor de Hermione.
Un día, mientras estaban en el Gran Salón, Ron se acercó a ellos y les dijo: "Sabéis, siempre pensé que Snape era un tipo extraño, pero ahora veo que es un hombre feliz. Gracias a ti, Hermione".
Hermione sonrió. "Gracias, Ron. Severus es un hombre increíble".
Snape puso su mano en el hombro de Hermione. "Gracias, Ron. Hermione es mi todo".
Y con eso, la pareja siguió adelante, sabiendo que su amor era fuerte y verdadero.
