Stellae

Capítulo 64

Me preocupe al verlo desmayarse, no debió de hacer eso pero lo entiendo yo hubiera hecho para acabar con todo eso.

Segundos después entro el concejo exterminando con las últimas bestias que quedaron malheridos, buscando la causa del porque pero nadie supo que paso y yo no diría nada, solo tome a mi novio para salir de ahí y llevarlo a su casa.

No había nadie lo deje en su habitación y me recosté junto a él esperando hasta que despierte, no me importa lo demás solo el y se agotó no me esta gustando que esto le provoque su magia.

Me quede dormido no se en que momento hasta que el grito de abajo me despertó provocando que mi rubio también lo hiciera.

—¿Qué paso?

—Te desmayaste, y te traje a tu casa —digo para acercarme más a él—. Me asustaste.

—Perdón —dice para besarme de forma lenta.

Paso mis manos por debajo de su camisa sintiendo lo suave de su piel, se separo de mí mientras sonreía.

—Vamos abajo quiero saber que pasa.

—Mi chismoso.

Al llegar abajo, su tía Aitne estaba gritando y aun lado de ella estaba la tal Romina con una postura de suficiencia como si hubiera ganado algo importante.

—¡SON UNOS MALDITOS MENTIROSOS! —grito rompiendo algunos floreros.

—Aitne.

Llego mi suegro para sujetarla mientras balbuceaba varias cosas que no se entendían y de apoco fueron entraron los demás.

Al igual que sus padres, siento que esto se pondrá feo, me puse detrás de Scor para abrazarlo pegándolo a mi pecho.

—¿Qué es todo este escándalo —pregunta su abuela pasando por un lado de nosotros dándonos una mala mirada.

—Eres un mala madre.

—Respétame Aitne.

—No lo hare y menos sabiendo lo que me hicieron hace años, ¿Cómo pudieron? —dice con las voz ronca supongo que ha estado llorando.

—Estas hablando puras estupideces.

—Basta padre, Aitne, ¿Qué pasa?

—Me arrebataron a mi hijo, Orión me han estado ocultando qué me borraron mi memoria y se deshicieron de mi hijo.

Oh por las estrellas, como fueron capaces de hacer eso.

—Al igual que a mi melodía.

—¿Quién te ha dicho eso? —pregunta eufórico.

—Yo, señor Benson y como sabe es un grave problema para usted.

No me está gustando todo esto.

—Es mentira.

—Mentira lo que le han hecho creer a su hija, tiene a su melodía y un hui qué fue productor de esa relación y que hicieron le borraron la memoria se deshicieron de todo aquello que podría ser un error en su vida —exclama poniéndose enfrente de él.

—Sin mencionar que su familia ha fallado rotundamente, su nieta no pudo ayudar porque estaba en Nekkar, su nieto se desmayo por la sangre.

Respire tranquilo no importa que crean que fue por eso.

—Y los Grant no se quedan atrás dan en claro que no sirven para cuidar este pueblo, ahora yo tendré el control por tiempo indefinido —declara orgullosa—. Ordenas de las mismas estrellas.

—Romina creo que esa no es la solución.

—Orión las vidas de los normales estuvieron en peligro esta noche y nadie pudo hacer anda y tus hijos no fueron de ayuda ni menos los Grant así que esta noche les bloqueare su magia hasta nuevo aviso y los queridos amigos tampoco podrán usar su energía vampira.

Eso no, que le pasa, y no fui el único en pensar eso todos se exaltación y se quedaron pero basto un chasquido para que todos se callaran y sentir un golpe en el pecho, mientras mi rubiecito se sujetaba su mano.

—Hasta que prueben lo contrario no tendría anda, sigan con sus vidas o demuestren que son parte de esto y están dispuestos a proteger al pueblo, me voy que pasen una buena noche.

—¿Donde esta? —pide la tía Aitne sin desesperada.

—No lo sabemos.

—Mentira —exclama euforica.

—No lo es, esa es la verdad lo abandonamos en Effenol —responde su madre.

Se fue sin decir más siendo seguida por sus hermanos, mis padres llegaron poco después enterando se de las noticias, pero ellos ya lo sabían por que Romina fue con ellos igual.

Como se supone que nos cuidemos sino tenemos con que, abrace fuerte a mi rubio no se lo que nos espera y al parecer a nadie en la sala pero mientras lo tenga a él se que podremos salir de esta, lo importe es que sigamos juntos buscando la solución para esto.