Love Of Style Cliche

Capítulo 12

Camille

Sali de la universidad rápidamente después de que los chicos se despidieran de mi con bromas que no fueron para nada agradables, no soportaba ni un minuto más estando ahí adentro con ellos.

Todo por culpa de Stefan, de tan solo recordar lo que había dicho mi sangre hervía, lo único que necesitaba era irme a casa y dormir para olvidarme de todo, después tendría tiempo de pensar sobre el trabajo que tenía con el susodicho.

Subí al auto y me marche de ahí en dirección a casa, en el trayecto sonó mi celular avisando que tenía una nueva notificación, tome el teléfono y le di una rápida mirada para saber de quien era el mensaje. No pude evitar sorprenderme al ver que se trataba de mi padre.

Aparqué en una esquina colocando las intermitentes, abrí el chat y comencé a leer el mensaje de mi padre. En el cual preguntaba si ya había salido de la universidad.

Me encontraba confundida, era demasiado extraño para mi recibir un mensaje por parte mi padre, era mas probable recibir uno del abuelo que de él.

Respondí rápidamente porque no era un hombre muy paciente, no tarde mucho en recibir una respuesta por parte de mi padre. Me quede mucho mas desconcertada al leer su mensaje, en él decía que llegaría a casa y que lo esperara para comer junto con Matthew. Al principio creí que era una broma.

¿Mi padre llegando temprano a casa? Debía estar soñando en estos momentos. Me di un leve pellizco en el brazo para comprobar si no era un sueño y en efecto, no lo era.

Le mande un mensaje preguntando si era verdad o era algún tipo de broma de su parte solo para asegurarme. Era tonto, pero seguía creyendo que era alguna clase de broma de mi padre.

Solo que el problema era que mi padre no hacia bromas de este tipo, aparte que no le gustaban, le desagradaban a tal punto de aborrecer a las personas que las hacían.

Era muy aburrido.

Me respondió bastante seco, pero eso me confirmo que no era una broma o una clase de juego, suspire aliviada o mas bien preocupada, solo veía a mis padres por las noches durante la cena si es que llegaban temprano y en los desayunos.

No los había visto hoy, suponía que no habían llegado anoche a casa porque tampoco los había visto esta mañana y Matthew no los menciono en ningún momento.

Arranque y seguí mi trayecto hacia la casa, faltaba poco para que llegara, tenía que llegar antes para recibir a mi padre.

Unos diez minutos después aparque enfrente de la casa, tome mis cosas y baje del auto empezando a caminar dirigiéndome a la puerta, hasta que esta fue abierta de golpe por alguien más, alce la mirada encontrándome con un pálido Matthew.

 – ¿Qué sucede? ¿Por qué estas tan pálido? – Pregunte confundida.

– ¿Es cierto que mi tío vendrá más temprano? – Incrédulo.

Solo asentí en respuesta, por alguna extraña razón todos mis primos e incluso tíos le temían a mi padre, según ellos porque era muy aterrador o su simple presencia daba demasiado miedo, pero yo lo veía normal, no tenia nada de aterrador mi padre solo cuando se enojaba, pero lo mínimo que te podía hacer era alzarte la voz. Nunca lo he visto enfadado o molesto porque jamás se ha enojado conmigo, pero según otras personas que si lo habían visto enojado decían que era peor que eso.

Y Matthew era uno de esos, recuerdo que hace unos años cuando éramos más pequeños él se había quedado a dormir como todos los fines de semanas, era una costumbre que teníamos.

Ese día no recordaba muy bien el porqué, pero mi padre se había enfadado demasiado con Matthew a tal punto que mi primo después de ser reprendido entro a mi habitación todo asustado escondiéndose bajo mis sabanas como si eso lo fuera a proteger.