Una tarde, mientras el sol comenzaba a teñir el cielo de tonos anaranjados y dorados, San y Wooyoung estaban sentados en un banco del parque. El aire cálido del verano acariciaba sus rostros, pero había algo más en el ambiente, una tensión palpable que San no podía ignorar. Se sentía una especie de electricidad entre ellos, como si algo importante estuviera a punto de suceder.
Wooyoung se volvió hacia él, sus ojos reflejaban una mezcla de determinación y vulnerabilidad. Su voz temblaba ligeramente cuando comenzó a hablar.
—San, hay algo que quiero decirte.
El corazón de San comenzó a latir con fuerza, como si ya supiera que las palabras de Wooyoung cambiarían todo. Trató de mantenerse calmado, pero no pudo evitar que una ola de nerviosismo lo invadiera.
—¿Qué sucede? —preguntó, intentando que su voz sonara neutral, aunque sabía que no lo había logrado del todo.
Wooyoung tomó una respiración profunda, como si necesitara reunir todo su valor para continuar. —Me gustas. No solo como amigo. Hay algo en ti que me atrae, algo que me hace querer estar a tu lado siempre.
San se quedó en silencio, sus pensamientos girando frenéticamente. Las palabras de Wooyoung lo habían tomado por sorpresa, no porque no hubiera notado los pequeños gestos, los momentos compartidos que parecían significar algo más, sino porque nunca había creído que alguien pudiera sentir eso por él. Especialmente alguien tan vibrante y lleno de vida como Wooyoung o su Woonie como el lo había apodado.
—Yo… también siento lo mismo —admitió finalmente, su voz apenas un susurro.
Pero tan pronto como las palabras salieron de su boca, una sombra de duda comenzó a formarse en su mente. ¿Y si Wooyoung solo decía eso por pena? ¿Y si sus sentimientos no eran tan profundos como los de él? San había pasado por tantas dificultades, había sentido la soledad tan profundamente, que la idea de ser amado verdaderamente parecía casi imposible. ¿Podría Wooyoung realmente verlo más allá de sus cicatrices, de su pasado?
Wooyoung le dió un abrazo, y aunque San sintió cómo su mundo se iluminaba por un instante, la duda no desapareció.
—¿Estás seguro de lo que dices? —preguntó San, su voz temblando ligeramente.
—Quiero decir, ¿no es solo que te sientes mal por mí? No quiero que me digas esto solo por compasión.
La sonrisa de Wooyoung se desvaneció un poco, y la seriedad se apoderó de su expresión. —San, no te lo digo por pena. Te lo digo porque cada vez que estoy contigo, siento que mi vida tiene más sentido. Me haces reír, me haces pensar, me haces sentir vivo de una manera que nadie más lo ha hecho. Y no es solo tu pasado o tus cicatrices, es todo tú, completo, lo que me atrae.
San bajó la mirada, luchando contra las lágrimas que amenazaban con caer. La sinceridad en la voz de Wooyoung era innegable, pero el miedo seguía allí, arraigado profundamente. Había aprendido a proteger su corazón, a no esperar demasiado para no salir herido.
—Es difícil de creer —murmuró San. —Después de todo lo que he pasado, es difícil creer que alguien pueda quererme así, de verdad.
Wooyoung extendió su mano y tomó la de San con firmeza, entrelazando sus dedos. —No tienes que creerlo todo de una vez. Déjame demostrarte que es verdad. Déjame estar a tu lado y probarte que mis sentimientos son reales.
San levantó la vista y sonrió un poco. Quería creer, quería dejarse llevar por esos sentimientos que tanto había reprimido. Tal vez, solo tal vez, podría permitirse un poco de esperanza.
—De acuerdo —dijo finalmente, con un suspiro. —Vamos a intentarlo.
Wooyoung sonrió de nuevo, una sonrisa que prometía paciencia y amor. San sintió que una parte de su carga se aliviaba, y aunque la duda no desapareció por completo, supo que había encontrado una luz en medio de su oscuridad, alguien dispuesto a aceptarlo tal como era.
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Viva el Woosan 💖
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A través de la oscuridad - WOOSAN
RomanceSan tiene un accidente y pierde la vista haciendo que pierda la ilusión por vivir pero Wooyoung le ayuda en sus problemas y le acompaña durante los momento más duros.