Coral y las siete leyes | #Wattys2015

Capítulo 1

PAGINA 150 DE MI DIARIO:

Si hace tres días alguien me hubiera dicho que mi vida iba a cambiar de una forma tan espectacular, no me lo hubiera creído. Si alguien solo me hubiera insinuado todas las cosas que me iban a pasar, no me lo hubiera creído. Si hace tres días alguien me hubiera nombrado a todas las personas o seres que iba a conocer no me lo hubiera creído.

He pasado de ser una más en el mundo, a tener el mundo en mis manos. De ser una niña, a tener que crecer con la velocidad de un rayo. De no saber nada a saber demasiado. De vivir por vivir, a vivir para vivir...

Ahora conozco el amor, el honor y el valor, la magia que reina en este mundo y en otros. Las leyes que rigen nuestras vidas, las de nuestros antepasados y las de nuestros descendientes. Me ha sido concedido el privilegio de traspasar el portal que nos lleva a otras realidades, dejando mi mente y mi corazón abiertos, a las verdades y sutilezas de la vida. Hoy puedo decir que envío mis bendiciones a todo y a todos.

Me gustaría haceros un regalo. Os he dejado sombreado en negrita frases mágicas. Éstas frases fueron dichas o fueron escritas por sabios de la Tierra. Las he cogido prestadas para ti. Son frases que os pueden servir o ayudar en alguna circunstancia de vuestra vida. O simplemente pueden haceros comprender determinadas cosas o a determinadas personas. Con las frases mágicas despertareis a una bella realidad. Si las repetís tres veces, en el momento en que necesitéis alguna de ellas, os darán un gran poder. Acostumbraos a sentir y percibir la fuerza que hay en vosotros, porque estáis hechos de pura magia.

Se me ha ocurrido una idea. Voy a escribir un diario. Hace tiempo que le estoy dando vueltas y creo que voy a hacerlo. Allí escribiré todas las cosas que me pasen, todo lo que vea, todo lo que oiga y todo lo que sienta. De esta forma quedará plasmado en el papel toda una vida. Escribiré detalladamente todas mis experiencias, y lo escribiré de tal forma, que mi historia resulte realmente interesante. Cuando crea conveniente lo terminaré. Entonces cogeré el diario y lo envolveré en papel de colores. Después le pondré un resistente plástico protector y lo guardaré en una caja dorada. Me llevaré la caja dorada al sitio más recóndito que encuentre y la enterraré, bien profundo. Dejaré mi historia y mi vida allí enterradas, en la caja dorada, con la esperanza de que dentro de mil o dos mil años, alguien la encuentre, y cuando lo lea, sabrá que un día yo existí.

PAGINA 1 DE MI DIARIO:

"Hola. Mi nombre es Coral y esta es mi historia.

Tengo doce años. Vivo en una casa con mis cuatro hermanos y mis padres. Es una casa muy bonita con un pequeño jardín. Tenemos dos plantas, bajo está la cocina y el salón, y arriba los dormitorios. Es una casa bastante acogedora.

El lugar donde vivo no os lo voy a desvelar por el momento, para preservar mi intimidad y esas cosas. Digamos que vivo en un lugar de la Tierra, de cuyo nombre no quiero acordarme, tal como decía Cervantes en su obra "El Quijote de la Mancha".

Los pequeños son dos gemelos preciosos, se llaman Oscar y Rubén y las mayores son ¡dos gemelas también! Se llaman Susana y Carla. Mi abuela decía que mi madre era una fábrica de hacer gemelos, a excepción de mí, claro. Yo he sido la excepción. Estoy rodeada de tanto hermano y realmente me siento tan sola... ¿Porque no he tenido yo también una hermana gemela? Ellos tienen el apoyo mutuo de su gemelo, pero yo, aunque los quiero mucho a los cuatro, (un poquito más a los peques, que tienen dos años y están para comérselos), me siento un poco desplazada. Mis hermanas mayores tienen quince años y están insoportables. Que si este vestido no me gusta porque me hace gorda.....que si yo no pienso limpiar el baño porque me acabo de pintar las uñas.... Ellas pasan de mí un montón, no me escuchan, siempre me mandan a cuidar de los peques para poder ellas hablar por teléfono con sus amigas. ¡Se pasan el día hablando con el móvil! ¡y mi padre no les dice nada!, claro, son las niñas de sus ojos. Y los peques porque son los peques, también, todos a darles mimos. ¿Y yo quéeeeeeee? Eeeeooooooo, estoy aquíiiiii. Yo como el miércoles, en mitad de la semana, molestando.