NO SOMOS INOCENTES | TAEHYUNG Y TN [+18]

HERIDAS

Ya habían pasado pocas semanas que habíamos regresado de Japón. Las cosas con Taehyung se sentían bastante tranquilas y agradables. Vivir juntos es muy lindo. Empezamos a tener una nueva rutina que consistía en que los fines de semana conectaríamos con la naturaleza, por lo que íbamos a lugares cerca de Seúl de ese tipo. A veces Jungkook o Jimin nos acompañaban y disfrutábamos mucho la convivencia, era bastante divertida. Nos tomábamos fotos y comíamos comida rápida de algún lugar que nos quedara de paso.

Por otro lado, debo admitir que la vida que estaba viviendo en este momento me gustaba demasiado, pero, al mismo tiempo, aún hay momentos en los que recuerdo lo que pasó con Enzo, ese día en su apartamento temporal... El beso. La culpa de ese momento me atormentaba por dentro, pero yo estoy segura de que las cosas con Enzo ya son pasado y con quien yo quiero estar realmente es con Taehyung.

En este momento me encontraba conduciendo en mi auto, dirigiéndome a mi departamento, ya que mi mamá vendría a la ciudad y se quedaría ahí, por lo que decidí contratar a una persona que fuera a limpiar todo. No es que estuviera desordenado, pero como ya saben, vivo en otra casa con Taehyung, mi departamento luce un poco abandonado.

Estacione mi coche en el estacionamiento y bajé para dirigirme al elevador. Mi outfit consistía en ropa deportiva, unos leggings, tenis de color blanco un poco altos, y una sudadera oversize de color blanco, y llevaba mi cabello negro largo atado en una coleta hacia atrás, me sentía bastante cómoda. Salí del elevador y caminé por el pasillo para dirigirme a mi departamento.

Me detuve en seco porque vi cómo Namjoon salía de su departamento porque vive en mi mismo edificio. Nos quedamos mirando, reconociendo nuestros rostros y después sonreímos.

Me acerqué a él y le di un abrazo para saludarlo.

-Hola, Nam, ¿cómo estás? —le sonreí. No lo había visto desde hace como una semana en una reunión que tuvimos con todo el equipo.

—-Me da gusto verte T/N-me regresó la sonrisa—. ¿Qué te trae por aquí? —preguntó.

-Mi mamá vendrá a la ciudad de visita, entonces se quedará en mi departamento y ahorita vendrá una chica que limpiará todo -le expliqué--¿Me acompañas en lo que llega la chica?

-Claro - asintió con la cabeza y nos dirigimos a mi departamento.

Puse el código y entramos.

Al entrar, cerré la puerta y me dirigí a abrir las persianas para que entrase un poco de luz. Suspire al ver todo mi departamento. Todo estaba ordenado, pero había un poco de polvo, ya que no venía desde hace unas dos semanas.

—-Debo admitir que extraño vivir aquí —le dije a Nam

—-Y yo los domingos contigo y Jimin pasándola juntos —respondió.

Lo miré con nostalgia.

-Qué recuerdos, ahora las cosas cambiaron y convivimos de otra manera-le respondí.

Nam me sonrió amablemente.

ÉL y yo nos sentamos en mi sofá de la sala, y nos quedamos viendo nuestro reflejo en el televisor que está enfrente.

-Tengo que confesarte algo, Nam, tengo que hablar de esto con alguien, si no siento que voy a enloquecer -le dije girándome un poco hacia él.

—-¿Qué pasa?-dijo en tono preocupado mirándome.

-Bueno, primero vamos a mi habitación y acompáñame a mi armario para llevarme unas cosas-le dije poniéndome de pie y dirigiéndome a mi habitación para entrar el walk-in closet