Capítulo 39

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TN:
Desperté con un día muy nublado en la habitación del hotel, solamente Kamekon a y mi hermana sabían dónde estaba .
Pedí para desayunar tostadas con tomate y un café con leche.
Seguía sin procesar muy bien todo.
Solamente llevaba aquí un día y Rachel ya me estaba llamando.
Mi única pregunta en la cabeza es como había pasado de ser una persona respetada y temida a huir de un hombre así.
-¿Diga? - un número desconocido me estaba llamando.
- TN...- era Steve .
-¿Que quieres?
- Hablemos, porque no es lo que tú piensas, confundiste las cosas
-Vi lo que vi, un chupetón en tu cuello.
-No es así, dejame explicarte, vuelve a casa conmigo.
- No tengo nada que hablar contigo, eres un puto infiel, pensaba que lo había visto todo de ti. Pero sinceramente no pensaba que serías tan infeliz. Decías ser diferente a Adam y no se yo sinceramente que decir. Separados al nacer supongo.
-No tengo nada que ver con ese.
-Sinceramente ahora mismo sois igualitos. Adiós.
Colgué el teléfono sin escuchar más explicaciones absurdas.
Sinceramente no me creo nada de lo que dice, crítico a Adam, no digo que fuera mejor que el, pero critica y hace lo mismo.
-Dime Rachel.
-Queria saber cómo estás.
-Steve me ha llamado, ¿Tú sabías algo de eso?
- No puedo hablar mucho, está aquí en casa , insiste en que me digamos donde estas. No puedes siempre que te pasa algo con el coger un avión y irte como si nada.
-Volvere pronto lo prometo.
-Si no vuelves en una semana le diré donde estas.
-No,no quiero verle.
- Madura de una puta vez TN, no puede huir .
-¿Como hicistes tu?
-No cometas el mismo error que yo. Vuelve habla con el, está no es mi pelea, no es mi problema. Pero sabes que siempre viene y últimamente con la esperanza de verte y hablar.
-Adios Rachel.
Salí a dar un paseo y comprar un café y pastas. Hacia frío en la calle me alegraba de ir abrigada.
Canadá, donde se comía sobre todo sirope de arce. Estaba dando un paseo por las calles de Canadá en concreto Ottawa, era preciosa su capital me quedaria aqui varias semanas al menos hasta que pasase todo lo malo.
Seguía en contacto con Julia, al menos.
En un mes se hacían diez meses de la muerte de Alonso, era diciembre ya. Quería decir que se acercaba navidad y efectivamente me tocaba volver a casa.
Iba tan distraída que no me fijé por donde andaba y me choque con alguien.
-Perdona, no miraba por donde iba.
-No te preocupes linda. - tenía un acento increíble, un pelo rizado negro, sus ojos verdes , tenía un poco de barba y sus labios carnosos, su mandíbula perfectamente marcada .
-No eres de aquí por tu acento - me habló el chico haciéndome salir del trance.
-Soy de California , me llamo Tn, ¿Y tú?
- Gabriel.
-Un gusto Gabriel.
-¿Llevas aquí mucho tiempo?- empezamos a caminar mientras nos hacíamos preguntas .
-Llegue ayer de Hawaii.
-¿Te gusta viajar?
-Huyo de mi novio infiel .
-Es un idiota al dejarte ir .
-Fue una noche que llegó del trabajo y le vi unos chupetónes.
Gabriel me abrazo, y sinceramente me sentía calentita, bueno, en Ottawa nevaba mucho así que vino bien ese abrazo.
-¿A qué te dedicas linda?
-Antes me dedicaba a las carreras clandestinas ahora no lo sé ni yo. ¿Y tú?
-Soy dueño de una empresa de coches.
-Suena bastante bien.
-¿Te quedarás mucho por aquí?
-En dos semanas me tengo que ir. Mañana podemos quedar para un café si quieres.
-Perfecto mañana estaré aquí a las cinco de la tarde.
Gabriel se despidió de mi y se fue, en cambio me senté en un banco a observar caer la nieve.
Hasta que recibí una llamada de Danny .
-Hola...
-Tn, gracias por contestar, es Steve , ha sufrido un infarto.
No sabía cómo reaccionar, era un idiota pero no le podía dejar solo.
-Cogere el primer vuelo a Hawaii estaré allí lo más pronto. Cualquier cosa llámame.
Corrí al hotel a hacer las maletas y pedí un taxi para el aeropuerto, me daba igual que me saliera más caro comprarlo del mismo día, el me necesitaba y lo sabía .

Steve Mcgarret y tu Donde viven las historias. Descúbrelo ahora