CÓMO NO MORIR DE AMOR

CAPÍTULO OCHO: ME GUSTAS

- Así que tu hermano también volvió.
_ Por eso no pude ver tus mensajes, pasó todo eso.
- Bueno está bien...
_ ¿Te parece si damos una vuelta antes de ir a tu casa?
- Sí, me parece perfecto.

_ Sara quería hablar contigo...
- ¿Ocurre algo?
_ Sí, bueno no, o sea es algo que quería decirte...
- Claro, puedes decirme.
_ Sé que a penas llevamos poco tiempo saliendo y bueno... quería serte honesto...
- ¿Sí?
_ Lo que pasa es que...

- Oye Louis... perdón que los interrumpa.
_ ¿Alana? ¿Qué pasó?
- Tu hermano me dijo quiso que les pregunte si querían salir a comer mañana... Hola ¿Tu eres Sara?
- Sí, mucho gusto.
- El gusto es mío, Louis me habló de ti, eres tan bonita como él te describió.
- ¿Louis?
_ ¡Alanaaa...!
- Por Dios Louis, ya dile todo así como me dijiste que lo harías... Bueno ya los invité, mañana cenamos los 4. Espero que vayas Sara. Nos vemos.
- Claa...ro. -se sonroja-
_ Ay Sara perdón, ella es la novia de mi hermano...
- No te preocupes. ¿Y qué le dijiste de mi?
_ Sobre eso quería hablarte.
- Te escucho...
_ Sara yo... Tu me gustas mucho... -también se sonroja-
- ¡¿Qué?!
_ Perdón pero no puedo seguir guardándome lo que siento... Desde el día que te vi por primera vez en el cine, no sabes lo que sentí aquel día. Cuando estuvimos viendo la película mientras conversábamos y nos reíamos e incluso cuando te acompañé a tu casa, me sentía raro conmigo mismo. Te juro que no había sentido algo así antes, y no sé si me crucé en tu camino o tú en el mío... Pero desde aquel día no puedo sacarte de mi cabeza, no sabía cómo decírtelo porque al mismo tiempo no quería perder lo que teníamos y que te alejes de mí. Pero es algo que ya no podía tenerlo guardado...
- Louis...
_ Por favor no seas tan dura...
- No tonto... Tu también me gustas... Me he sentido igual desde aquel día... Creí que ya te habías dado cuenta. ¿En serio no se notaba?
_ ¡¿En serio?! No me había dado cuenta...
- Louis, hasta hace poco nos besamos. ¿Crees que si no sintiera nada lo hubiese hecho?
_ Perdón, pensé que solo lo hiciste por eso moment...
- Mejor cállate antes de que lo arruines.
_ Ay, está bien.
- Bueno ya vamos. Aún no me has pedido nada...
_ ¿Pedirte algo?
- Louis, te voy a matar...
_ ¿Y ahora qué?
- A veces no sé si por eso me gustas más, pero ahora eres un idiota.
_ ¿Qué? ¡Ah, claro! Perdón jajaja.
¿Oye Sara quieres ser mi novia?
- Ya te estabas tardando. Claro que sí idiota...
-se acercan-
-empiezan a besarse-

-se escucha un ruido fuerte-

_ ¿Qué fue eso?
- Será mejor que ya nos vayamos.
_ Sí, mejor.

-10 minutos después-

- Gracias por traerme Louis.
_ No hay de que, es lo menos que pude haber hecho después de haberte ignorado toda la tarde.
- Descuida, pero la próxima al menos avísame que estás bien, solo eso quería saber, que estuvieses bien.
_ No volverá a pasar, te lo prometo.
- Está bien, ven aquí. -lo abaraza-
_ Ay no quiero irme...
- Tienes que hacerlo, recuerda que tu hermano acaba de llegar, deben estar todos juntos.
_ Bueno esta bien, por cierto. ¿Si podrás ir a la cena que dijo Alana?
- Sí, le diré a mi mamá, le diré que voy a ir contigo y te apuesto que me dará permiso. Le caíste muy bien, todos los días me pregunta por ti.
_ ¿En serio? Vaya, vendré más seguido entonces.
- Ahora tienes una excusa para venir. Y ya anda a tu casa, se te hará tarde.
_ Pero... ay, bueno ya me voy.
- Espera, antes déjame darte un beso. -lo besa-

_ Ahora ya me voy feliz...
- Ya puedes irte jaja.
_ Nos vemos, cuídate.
- Hasta luego Louis, me avisas cuando llegues.
_ Lo haré -le manda un beso-

Esa noche fue mágica, por fin pude decirle a Sara que me gustaba y lo mejor es que fui correspondido. Ahora Sara y yo ya eramos novios. Cuando llegué a casa le conté a Alana y estaba muy feliz, mañana tendríamos una excusa para salir y podríamos hacerlo para celebrar que ahora ella y yo estábamos juntos.