CÓMO NO MORIR DE AMOR

CAPÍTULO DIEZ: UNA CITA IMPERFECTA II

_ Llegamos.
- Así es, ya llegamos chicas.

- ¿El parque de diversiones?
_ Sí, creí que sería buena idea venir.
- ¿Buena? Es la mejor, hace años que no venía.

- Fue idea de Louis venir acá.
- Dijo que te podría gustar.

_ Bueno en gran parte sí.
- Muchas gracias -le da un beso en la mejilla-

- Bajemos de una vez.
- Sí, vamos.

Una vez que entramos nos subimos a la mayoría de juegos, desde los carritos chocones hasta la montaña rusa. Cada ves que veía a Sara en cada uno, notaba una gran felicidad, parecía una niña feliz y contenta, me daba tanta emoción verla así... Ahora era mi deber hacer que sus días sean así, quiero devolverle la felicidad que me trajo desde la primera vez que nos conocimos. Durante mucho tiempo me había alejado de ese sentimiento que era estar enamorado, pero a partir de que me di la oportunidad de enamorarme de ella no he dejado de imaginarme como sería si fuésemos novios, y ahora que lo somos no quiero arruinarlo, parece como si fuese la primera vez que sintiera esto, quizás ella debe ser el amor de mi vida. Si es así, no quiero que nada ni nadie nos separe.

- ¿Todo bien?
_ ¿Qué? Sí...
- Te quedaste pensando seguro, porque te quedaste con una cara de medio bobo.
_ Sí jaja así es...
- ¿Qué te parece si vamos al juego que está allá?
_ Sí, me parece bien.

- ¡Acérquense chicos! Si logran atinarle a los 5 aros colgantes te llevaras un oso de felpa, el que tu quieras. Solo tienen 8 pelotas para intentar darle a todos.

_ ¿Qué te parece?
- ¿Quieres hacerlo?
_ Sí, quiero intentarlo.

_ ¿Cuál es el precio por participar?
- Serían $3.00 hijo.
_ Ok. Aquí está.
- Adelante. Aquí están las pelotas.

-las recibe-

_ Solo son 5 aros, tengo 8 pelotas. Puedo fallar 3 y las otras sí o sí deben entrar. No es tan difícil. Aquí voy.

-lanza la primera-

- Uy casi le das hija, vamos te quedan 7.
- ¡Vamos Louis, vamos!

_ El poco peso de la pelota hace que casi al final se desvíe... no sé porqué creí que iba a se fácil.

-lanza las segunda-
-acierta-

- Eso hijo, ya vas la primera.
- ¡Muy bien Louis tu puedes!
_ ¡Esoo! 4 más.

-lanza la tercera-
-rebota en la pared de madera-

- ¡Ayyyy! ¡Noooo!
- ¡Oh no!
_ ¡¿Qué pasó?

- ¡Mi ojo!
_ ¡Noooo! Sara perdón...
- Hijo será mejor que te la lleves de aquí para que la revisen.
_ Sí eso haré.
- Ay me duele mucho.
_ De verdad lo siento, por favor resiste un poco. Buscaré a Bobby y Alana.

- ¡¿Louis?! ¿Qué fue lo qué pasó?
_ Alana por favor ayúdanos.
- Sara, ¿por qué se está cubriendo el rostro? ¿qué pasó?
_ Estuvimos en un juego de darle a unos aros y una pelota rebotó y le dio, por favor vamos, tienen que revisarla.
- ¿Qué? Claro, llamaré a tu hermano...

-ya en la clínica-

- Bien chicos, afortunadamente la pelota le dio cuando ella cerró ambos ojos... no es nada grave, les voy a respetar un pequeño frasco el cual contiene un líquido, deberá echarse unas gotas todos los días durante 1 mes. Si la parte del ojo y alrededores empieza a ponerse de color rojo o violeta no se vayan a asustar, debido al golpe es normal, por eso también les recetare un anti inflamatorio y una crema la cuál ayudará a que el moretón que le saldrá no le dure mucho tiempo. Por favor debe tratar de hacer el menor esfuerzo físico y les daré una lista con los alimentos que solo podrá comer este tiempo.

_ Muchas gracias Doctor. ¿Cómo está ella? ¿Tendrá qué quedarse?
- Louis, solo fue un golpe, no tiene que quedarse.
- Eso mismo iba a decirles...

-Sara aparece-

- Hola...
_ Sara. ¿Cómo te sientes ahora?
- Ya estoy mejor, solo me duele un poco, y siento un cosquilleo...
- Es algo normal, con las gotas que te recetare te calmará el cosquilleo y ardor que puedas sentir. No te vayas a quitar la gasa que tienes, espera hasta mañana para quitártelo ya que te pusimos una crema debajo la cuál tendrá que secar hasta el día siguiente.