Capítulo 4

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19 de enero, 8:30 a.m.

—¿Esto se ve bien?—Todoroki Shoto daba el intento de colocar unas lamparas en forma de nube en la pared como decoración. Maldición, era un héroe no un electricista o lo que sea.

—Ese está chueco—señaló Katsuki a una de las lámparas mientras doblaba ropa de bebé y la guardaba en una cajonera donde también organizaba pañales. El bicolor bufó al ver como la nube iba en caída libre.

Ambos se encontraban decorando la habitación de su futuro bebé que estaba a nada de nacer, Shoto se encargaba de todas las decoraciones que estarían en la pared y Katsuki ordenaba las pertenencias de su hijo en los lugares correspondientes.
Shoto cursaba ya los nueve meses de embarazo, por lo que llevar tremenda panzota hacía que caminar fuera un infierno y ni mencionar los dolores de espalda qué sufría. También no hace poco, tomaron la decisión de comprar oficialmente una casa en donde puedan criar a su hijo, ya que en el departamento donde vivian era perfecto para ellos dos solos, pero la llegada de un nuevo individuo los obligaba a agrandar espacio.

Adquirieron la propiedad en una zona residencial privada exclusiva de la ciudad, querían que Haise tuviera privacidad y que mejor que con la mejor seguridad. Ahora se encontraban en su nueva casa preparándola para recibir a su bebé.

—Ayúdame a bajar—pidió y el cenizo tomó su mano para que descendiera con cuidado de las mini escaleras.

—Nos esta quedando muy bien eh—recorrió con la mirada la habitación, admirando los colores, peluches, las decoraciones y la caja con la cuna que aún debían abrir —Creo que hay que llevar empezar a armar esto.

—Si, tenemos que armarla de una vez para tenerla lista—contestó siguiendo a Katsuki quién cargó la caja en el mueble que anteriormente estaba organizando.

—¿En donde la dejo?—preguntó entrando.

—Ahí, al lado del cambiador, pegada a la pared—hizo referencia a la pared en donde había hecho su mejor trabajo como electricista.

—Va—dejó caer la caja con cuidado en el suelo en donde le indicó Shoto para empezar a trabajar juntos.

Alrededor de veinte minutos ambos se encontraban sentados en el suelo con todas las piezas necesarias para armar una cuna, pero las cosas no estaban saliendo nada bien.

—¡Ugh, esto debería ser más fácil!—gruñó Bakugou, mientras intentaba ensamblar unas piezas. El ceño fruncido en su cara demostraba su frustración—¿Por qué tienen que ser tantas piezas?

—¿Será que tenemos que leer el manual?—Shoto intentaba juntar lo que parecía el barandal con al parecer la base. Ni idea, el estaba usando de guía la imagen de la caja.

—¿Tú crees?—alzó una ceja con ironía al ver lo que su esposo trataba de hacer con esas dos piezas, pero admitió que se veía adorable con su panzita de embarazado asesinando con la mirada a las piezas de la cuna.

Después de una larga hora pudieron terminar de armar la cuna sin que nada explotará, ya que cierta persona NECIA se reusaba a usar un manual con la excusa de que nadie lee esa porquería. Pero dejando eso de lado, Shoto admiró con ternura la cuna, imaginándose a su futuro retoño dormido ahí dentro. De tan solo imaginarlo hacia que su corazon se agitara de emoción.

—Quedó bien y SIN leer las instrucciones—mencionó Bakugou orgulloso de su trabajo en equipo.

Shoto asintió sonriente a lo dicho pero si sonrisa no duro mucho. Derrepente sintió un tirón en su abdomen qué lo hizo tensarse. Sin embargo a medida que avanzaban los yoctosegundos, la sensación se intensificó, convirtiéndose en un dolor agudo qué le hizo cerrar los ojos y sostener su panza.

Lazos De Poder | BakuTodo |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora