Diferentes ( SxS)

🥀09🥀

Deidara contemplaba el cuerpo de su amada, con una expresión de felicidad y anhelo, se veía tan hermosa, como un ángel.

Que él había decidió atrapar con sus propias manos.

Luego de que lograra llevarse a Sakura de la fiesta, sin que se dieran cuenta, Deidara la llevo hacia la casa oculta, que tenía en el bosque, donde solo él y Hidan sabía su ubicación.

Nadie conoció dicho lugar, así que era perfecto.

Pero sabían que Sasuke no tardaría en encontrarlos, así que solo esperaba que Hidan y sus amigos, se deshagan de ese maldito estorbo.

No iba a permitir, que le quitarán a Sakura, ella es solamente suya.

- no te preocupes mi amor, no dejaré que ese monustro nos separe- susurro el rubio acariciando la mejilla de la pelirrosa.

La cual se encontraba todavía inconciente, dormida en esa gran cama, en donde Deidara la había encadenado, para que no pudiera escapar.

Poco a poco Sakura abrió sus ojos y sintió miedo, al verse en un lugar desconocido.

- ¿Donde estoy?- se preguntó débilmente.

Intento incorporarse, pero se dio cuenta de que se encontraba encadenada, haciendo que fuera incapaz de moverse.

- pero que rayos... ¡¿Donde demonios estoy?!..

- estás en casa mi cariño- hablo Deidara, a lo que Sakura lo miro perpleja y asustada al mismo tiempo.

- ¿D-Deidara?... ¿Que está sucediendo?... ¿Por que estoy en este lugar?.

- son muchas preguntas no crees, la repuesta es obvia.

- No, no es obvio, ¡¿Que demonios estás haciendo?!.

- sabías que te ves hermosa cuándo te enojas, eso me excita.

- ¡Sueltame Deidara!- exigió ella intentando forcejear con las cadenas.

Lastimandose las muñecas, Deidara la sujeto para impedir que pudiera seguir lastimandose.

- deja de hacer eso, no ves que te estás lastimado.

- entonces déjame ir.

- ¡Eso no va a pasar! ¡Eres mía Sakura mia!.

Sakura sorprendida miró a Deidara con horror, ¿Adónde quedó ese dulce niño, que la protegía y cuidaba?, ¿Donde quedo esa persona que consideraba un hermano mayor?, Ya no estaba o tal vez, nunca fue aquel niño que le hizo creer que era.

Deidara estaba mostrándole su verdadera personalidad.

Aquella que durante tanto tiempo, estuvo reprimiendo, solo porque al comienzo creyó que con tenerla cerca era suficiente.

Pero no era así.

Luego de que llegara Sasuke, se dio cuenta de que la podía perder para siempre, así que decidió dejara de fingir.

Mostrándole así una parte sicópata y retorcida a la mujer que quería.

- ¡No soy tuya, nunca seré tuya Deidara!, ¡Eres mi primo!.

- ¡Cállate!- exclamó el rubio dándole un bofetada, sacándole un pequeño quejido de dolor a la pelirrosa- escúchame bien Sakura, eres mía y que te quede claro eso, tu guardespaldas ni siquiera pudo protegerte, es tan patético.

- no hables así de Sasuke, él no es y nunca será patético como tu- gruñó ella frunciendo el ceño.

Haciendo molestar más a Deidara, el cual ya se estaba cansado de la rebeldía de su pelirrosa.