Curiosidad.

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Tim es chismoso, aunque no quiera admitirlo. Por eso cuando Batman le asignó la zona de los teatros supo que debía investigar las escapadas de Batgirl. Aunque sin una pista previa de dónde pudo ir se le haría difícil.

Aunque obtuvo una pista crucial, cuando bajó a la baticueva se encontró el libro sobre la baticomputadora. Alguien más lo dejaría allí y seguiría con sus cosas, pero no él. Al abrir la primera página se sorprendió de ver la dedicatoria.

Al parecer Barabara tiene un amigo, uno que la conoce muy bien. Al revisar notó que tenía el sello de la biblioteca, solamente tuvo que revisar los registros y compararlos con los videos de seguridad.

Tuvo dos candidatos, un hombre en los cuarenta y otro joven. Pero al revisar los registros se decantó por este último. La dirección de residencia arrojaba la zona que le tocaba patrullar. Por lo que decidió pasarse a revisar.

Ahora estaba mirándolo desde la oscuridad de una cornisa. Simplemente está sentado a la orilla del tejado. No parecía tener algo especial, no es fuerte y tiene cara de que usa los dedos para contar.

Aunque para ser sincero ella es de gustos peculiares. Se quedó ahí unos minutos, al no ver nada raro, decidió continuar con el trabajo. Puede que tenga que seguirlo de otro modo. 





Tenía cosas que hacer, pero la curiosidad/chisme siempre lo había llevado a ser un gran detective. Por eso decidió seguir al chico a plena luz del día, hacerlo suponía ser más cuidadoso. Pero él sabía cómo hacerlo.

-- Lo siento. -- se disculpa y recoge el libro que dejo caer a propósito.

-- Tranquilo enano, solo ten cuidado. Por esta zona no son tan amables. -- asiente y sigue con su camino.

Al ver que está lo suficientemente lejos, saca su teléfono y verifica que el micrófono esté funcionando. -- It's okay to eat fish,  'Cause they don't have any feelings..... Something in the way..... Uhhhhh..... Something in the way. --

Lo aleja de su oído, otra cosa negativa para agregar es que no tiene voz para cantar. Con esto no tiene que seguirlo de cerca, solo esperar a ver si encuentra algo interesante. Durante unos minutos solo se dedica a cantar, hasta que llega a la entrada de una casa.

Tim reconoce a varios de los pandilleros que están frente a esta, algunos les desvío el tabique. Estos saludan al joven, pero se queda hablando con, el que supone, que es el líder entre ellos.

-- Gracias por darle clases a CJ. -- le extiende un par de billetes.

-- Sabes que lo hago por amistad. -- aun así, no cede con el pago, por lo que tiene que aceptar. Le dan paso y sube los escalones del edificio.

-- Oye, ____. -- el mencionado se gira. -- Hoy va a pasar algo grande en las calles, que tu mamá y tú se queden en casa. --

Lo mira de arriba a abajo, son amigos desde que eran niños. Ambos estuvieron en la misma pandilla hace tiempo, solo que él sí tuvo la cabeza para salirse. Sabe que nunca le gustó toda esa cosa de golpear y robar, pero lleva comida a la mesa y eso es suficiente.

Solo el joven sabe que quiere salirse, pero ya ha estado demasiado tiempo adentro como para hacerlo. Si el Pingüino, o alguno de sus lugar tenientes, se entera de que quiere hacerlo... Digamos que terminará dando un largo chapuzón en el mar. 

-- ¿Qué está pasando? -- su amigo le da una mirada severa.

-- Nada que te importe, te aviso por lo que queda de nuestra amistad. -- suelta un suspiro y entra al edificio.

-- Oh, querido, gracias por venir. -- la madre de CJ lo recibe con un abrazo.

-- Sabe que me gusta ayudar al pequeño. -- camina hasta la sala y lo encuentra con varios libros alrededor.

-- ¿Cómo vas? -- le extiende un ejercicio de matemáticas. -- Te enseñare un truco milenario. -- 

Estuvo a punto de cortar la transmisión e irse con la información que había obtenido. Sin embargo, algo más le llamó la atención. -- ¿Vas a ir a Black Cate está noche? --

-- ¿Cómo sabes de eso? -- se acerca a él para que la dama no escuché la conversación.

-- Mi hermano y yo vamos a ir esta noche, me dijo que lo están llamando a todos. -- el joven lo mira preocupado.

-- Prométeme que no irás. -- el niño lo mira dudoso. -- CJ. --

-- Pero si él me obliga. -- coloca una mano en su cabeza y ale agita el pelo.

-- Yo me encargó de él, tú solo dile que te duele el estómago y que no podrás ir. -- asiente y ambos continúan con la lección.

Conociéndote.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora