Love sticks, sweat drips
Break the lock if it don't fit
A kick in the teeth is good for some
A kiss with a fist is better than none
—
Castiel no se consideraba la persona más observadora del mundo. Más que nada porque la vida de los demás, mientras no interfiriera con la propia, no le importaba mucho.
Aún así, incluso él notaba un patrón cuando veía uno, y el patrón que regía su vida era la regla de tres: las cosas, buenas o malas, vienen en trios.
Un ejemplo de esto fue cuándo en primer año, había logrado robar las llaves del sótano de la taquilla de Nathaniel para usarlo como sala de ensayos con Lysandro. Lo mejor es que ni siquiera se metió en problemas, gracias a sus grandes habilidades de convencimiento (coerción). Luego esa misma tarde mientras caminaba a su departamento se encontró un billete de $30 en el suelo, y pudo al fin comprar ese CD de Winged Skull que tanto había esperado.
Reafirmó su teoría una vez más en segundo año. El día ya había comenzado mal; el manager de la agencia de talentos lo llamó por teléfono para avisarle que solo estaban interesados en Debrah. Como si aquello no fuera suficiente, luego de eso atrapó al inútil de Nathaniel acosando a su novia; y para rematarla, esa misma novia había roto con él minutos después.
Entonces, gracias a la indudable evidencia, debió estar más que preparado para las señales que le estaba dando el universo aquel día.
La primera señal había sucedido la noche anterior a los hechos.
Era una noche tranquila como ninguna, Castiel se encontraba afinando su guitarra, y si bien a él le gustaba considerarse a sí mismo como un experto, era humano, por lo que al estar distraído con algo que ya ni siquiera recuerda, aplicó demasiada fuerza al girar una de las clavijas, por lo que se rompió la cuerda debido a la tensión.
Solo pudo suspirar con enojo. Era demasiado tarde ya, tendría que comprar una nueva al siguiente día.
La segunda señal había ocurrido aquella mañana, cuando su alarma decidió no sonar. Y bueno, tuvo que prácticamente salir corriendo, a duras penas alcanzó a vestirse, y ni hablar de desayunar.
Y la tercera señal...
—Lo siento mucho. — dijo el profesor Boris, sacando a Castiel de sus pensamientos. El docente se veía nervioso, de seguro ya estaba al tanto de las explosivas reacciones del muchacho— Ustedes son los únicos que no se han anotado con un compañero o compañera para la actividad, y como es una actividad para reforzar el compañerismo, los hemos emparejado juntos...
El pelirrojo no pudo evitar rodar los ojos con desagrado, ¿por qué con él? Si bien no le había preguntado de antemano, había asumido que haría la actividad con su amigo Lysandro, como todos los años desde que se habían hecho mejores amigos, pero no contaba con que este ya hubiera formado pareja con otra persona. Que mal.
Escuchó suspirar al deletonto a su lado, que tampoco se le veía muy contento con la noticia. Castiel le dirigió la mirada; ambos chicos hicieron contacto visual por un segundo, y sus rostros se endurecieron con odio casi al mismo tiempo.
Todo apuntaba a que sería el día más largo de su joven vida.
No era un secreto que se detestaban, si bien existió una época en la que Castiel habría considerado a Nathaniel como algo cercano a un casi-amigo. Bueno, no realmente, siempre le había molestado su actitud de hijo de papi, pero al menos hacía lo mismo que con el resto de las personas del instituto, ignorarlo. En primer año llevaron una especie de compañerismo solo por el secreto compartido de sus actividades extra-curriculares en el sótano, Nathaniel hasta en más de una ocasión había ido a verles ensayar. Incluso Lysandro le había tomado aprecio.
ESTÁS LEYENDO
Del Odio Al Amor Hay Dos Pasos - CDM (Castiel x Nathaniel)
RomanceCastiel no se consideraba la persona más observadora del mundo. Más que nada porque la vida de los demás, mientras no interfiriera con la propia, no le importaba mucho. Aún así, incluso él notaba un patrón cuando veía uno, y el patrón que regía su...