Migue y Lando bajaron al estacionamiento del edificio, donde Lando había dejado su auto. Al llegar, Lando abrió la puerta del pasajero y le hizo un gesto a Migue para que entrara.
"Sube, amigo. Te llevo al boliche", dijo Lando con una sonrisa.
Migue entró en el auto y se acomodó en el asiento. Lando arrancó el motor y comenzó a manejar hacia el boliche.
"¿Sabes, Migue? La carrera de hoy fue increíble", dijo Lando, aún emocionado por su victoria.
"¡Lo sé! ¡Fue épica!", respondió Migue. "Y tú fuiste el héroe del día. ¡Tu conducción fue impresionante!"
Lando sonrió, sintiendo orgullo por su habilidad. "Gracias, Migue. Me esforcé mucho para ganar. Y fue genial sentir tu apoyo en la pista".
Migue asintió. "Sí, te apoyé con todo mi corazón. Eres un conductor excepcional".
Mientras continuaban manejando, Migue y Lando siguieron platicando sobre la carrera y sus experiencias. Finalmente, llegaron al boliche.
Al entrar, Migue vio que el lugar estaba lleno de gente y la música sonaba alta. Lando lo llevó a la barra y pidió dos bebidas.
"¡Disfruta la noche, amigo!", dijo Lando. "Te lo mereces, gracias por ser un amigo tan bueno".
Migue sonrió y brindó con Lando. "¡Salud! ¡Por tu victoria!".
Luego Lando llevó a Migue a la zona VIP del boliche, donde estaban todos los pilotos celebrando. Subieron las escaleras y entraron en la zona exclusiva, donde la música sonaba más suave y la iluminación era más tenue.
Migue siguió a Lando. Lando pidió dos bebidas y se sentaron en unos sillones cómodos, rodeados de la atmósfera festiva.
Disfrutaban de sus bebidas y charlaban animadamente, riendo y recordando momentos de la carrera. De repente, Migue vio llegar a Charles con Alison. Al verlo, Migue bajó la mirada rápidamente y hizo como que no lo había visto, intentando disimular su sorpresa.
Siguió hablando con Lando, tratando de mantener la conversación fluida y natural, como si no hubiera visto a Charles. Lando, ajeno a la situación, seguía hablando y riendo, sin notar nada.
Por otro lado Charles subiéndo las escaleras con Alison, sonriendo y charlando con ella. También logra verlo a él y Lando juntos en el sillón, su expresión cambió repentinamente. Su rostro se tensó, y sus ojos se entrecerraron, revelando una mezcla de enojo y celos.
Alison, ajena a la tensión, siguió sonriendo y charlando, pero Charles la tomó del brazo y la dirigió hacia la barra, alejándose de Migue y Lando. Se sentaron en dos taburetes altos, y Charles pidió dos bebidas al bartender, sin decir una palabra.
Su mirada se desvió hacia Migue y Lando, y por un momento, pareció como si estuviera estudiando la escena, su rostro reflejando una mezcla de emociones. Luego, se volvió hacia Alison y comenzó a hablar con ella, intentando disimular su malestar.
Terminaron sus bebidas en la barra y luego se levantaron para unirse a un grupo de conocidos que estaban en una mesa cercana. Se sentaron con ellos y comenzaron a charlar y reír, intentando disfrutar de la noche.
Charles parecía haber olvidado su momento de celos y enojo, y ahora se concentraba en divertirse con sus amigos.
Mientras tanto, Migue y Lando seguían sentados en el sillón, disfrutando de su conversación y sin prestar atención a Charles y su grupo. La noche seguía adelante, con la música ya sonando alta y la gente disfrutando de la celebración.
Lando se levantó del sillón y le hizo un gesto a Migue para que lo siguiera. "Vamos, amigo, te presento a los demás", dijo con una sonrisa.
Migue se levantó y siguió a Lando hacia la mesa donde estaban Charles, rodeados de un grupo de pilotos y amigos. Al acercarse, Charles levantó la vista y sus ojos se encontraron con los de Migue, pero no hubo ninguna reacción visible.
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Amor Velocidad Y Adrenalina
RomanceLa novela sigue a Migue, un apasionado joven argentino de 21 años cuya vida gira en torno a la Fórmula 1. Su entusiasmo por el automovilismo lo lleva a soñar con conocer a sus ídolos, pero nunca imagina que ese sueño se hará realidad. Un giro inespe...