Siento un gran peso sobre mí, abro los ojos y lo veo.- Chi-chimuelo, no me dejas respirar.- El se bajo de mí rápidamente.
Tomo mí camisa y me la colocó, miro a mí derecha y, vacío, Astrid no está conmigo, pero una voz llama mí atención.
-¡Estoy aquí!.- Dijo Astrid desde abajo.
-Buenos días.- Le digo mientras comienzo a bajar por las escaleras, el olor de una rica comida me llama.
Al llegar a bajo y ver hacia donde se encuentra Astrid, me sorprendo bastante.
-¿Mama?.
-Buen día, Hipo.
-Buen día mamá, ¿Que te trae por aquí?.
-¿Acaso una madre no puede comer con su hijo?
-Supongo, es mí primera vez teniendo una madre.
Todo se quedó en silencio.
-¿Po-porque mejor no te sientas Mí amor?.- Dice Astrid con un tono nervioso.
Hago una mueca y me dirijo hacia la puerta junto a Chimuelo.-¿A dónde vas?
-A algún lugar alejado del archipiélago.
Y no mentía.Pasaron varios minutos en medio del mar en los que solo me los pasé gritando a la nada.
Un dragón aparece a mí lado.
-¿Estresado?, Jefe.- Dijo un hombre encima del dragón.
-¿Que haces aquí Viggo?.
-Note a simple vista que estabas estresado, y me interesó, ¿Que podría poner de mal humor al pequeño Hipo a estas horas de la mañana?.
-Mi madre.
-Oh, así que es ella, sabes, podría desviar su atención de ti, pero tu no me quieres cerca de ella.
-¿Puedo confiar en ti?.
-¿Confiarías en mí?.
Solo asentí con la cabeza y el volvió a desaparecer entre las nubes.Minutos después regrese a casa, entro y, no me lo puedo creer.
Ahora no son solo Astrid y mí madre, si no que también se encuentra Viggo, sentado, en silencio, con la cabeza gacha, estoy jodido, pero creo que es momento de enfrentar a mí madre de cara junto con mis inquietudes.Me siento a un lado de Viggo y le susurro en el oído mientras mí madre y Astrid no me ven.
-¿Que sucedió?.
-Me superaron en número.
-Mierda.- Mí madre oyó eso último.Pasaron varios minutos y todos nos encontrabamos en la mesa.
Todos nos encontramos comiendo en silencio, al menos hasta que mí madre decidió abrir la boca.-¿Que es lo que te molesta, Hipo?.
Me quedé en silencio.
-Me siento extraño.- Breve silenció.- Desde que asesine a ese dragón...- Se quedaron en silencio.- No me siento cómodo junto a ti, una amante de dragones, y yo.. Ahora soy igual a ellos, a los cazadores de dragones..Viggo soltó una carcajada.
-¿En serio?, ¿Era eso?.- Dejo un breve silencio.- Hiciste lo mejor para tu gente, Hipo.
Coloque mí mano sobre su hombro.
-Gracias Viggo, gracias a todos, realmente muchas cosas estuvieron pasando por mí cabeza últimamente y no sabía que hacer.
El almuerzo continuo "normal" por así decirlo, evitando el hecho de que mí madre y Astrid se aliaron y comenzaron a nombrar algunos aspectos no muy buenos sobre mí, realmente se llevan bien.Todos terminamos, y Viggo junto a mí madre se fueron de mí casa, dejándome solo con Astrid.
-¿Entonces eso era lo que te inquietaba?.
-Si.. lo siento por no decírtelo antes..
Ella hace una mueca.
-¿Puedes confiar en mí?.
-Claro.- Digo Dudoso.
-Con eso estoy conforme.
Tomo su mentón, y le doy un suave beso en los labios.Pasaron varias horas y me encuentro en el gran salón.
-Tenemos que encontrarlo.- Exclamó alguien.
-Aunque lo encontremos, no tenemos muchas oportunidades de acabar con el, no serviría de nada, y el sabría que sabemos de su existencia, podría apresurar sus planes y atacar Berk.
-Podemos enfrentarlo, tenemos dragones, Jinetes.
Yo solo me mantuve en silencio mientras mí madre y spitelout discuten.
-¿Tu que piensas Jefe?.
Breve silencio.
-Que ustedes deberían llegar a un acuerdo.- Mí madre hace una mueca, pero no me quería ver involucrado en una misión en la que mueran Jinetes, si Drago Manodura es tan temible como dice mamá, será difícil.
-Quien este de acuerdo con atacar antes de ser atacados, levanten la mano.- La mayoría de los presentes levantaron la mano, está decidido.
Mí madre hace una mueca, y Spitelout dio una orden.
-Todos a prepararse, iremos tras Drago Manodura.
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No soy uno más || Hipo x Astrid || Hiccstrid || Pausada
Science FictionHipo era la oveja negra en Berk, el solo quería ser aceptado por su padre, el líder de Berk. El aprovecha una dura noche de batalla, para escapar de Berk, sin saber que todos creían que el había muerto en su batalla contra un Skrill. En esta histor...