¿Arresto?

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El coche se estacionó al lado de un campo de Fútbol, concretamente el de la ribera. Estaba rodeado de árboles y un grupo de jóvenes estaba abajo en el campo, con la característica equipación del Raimon.

Bella estaba junto a Axel y Jude, después de la mentira que le soltó sobre que Mark Evans estaba de vacaciones unos días con su mujer decidió no dejarlo solo.

A la joven italiana no la engañaba cualquiera y sus sospechas fueron ciertas cuando al investigar un poco sobre la pelirroja supo que esta estaba en la ciudad de Inazuma y llevaba días sin publicar ninguna foto con su marido.

Las redes sociales siempre fueron una información valiosa para los detectives, aunque sonara irónico.

Las miradas estaban puestas sobre ellos y es que parecía la típica escena de una película en la que entran los protagonistas, los chicos estaban cada uno al lado de ella. Parecía que ellos la estaban protegiendo, cualquiera lo pensaría, pero pillado en aquel pantalón se encontraba su arma. Un solo disparo y acabaría con la vida de quien ella quisiera.

La joven no pudo evitar tragar saliva al ver junto a los menores un oso que se estaba moviendo de lado a lado. Parpadeó varias veces buscando que ese movimiento proviniera de su falta de sueño y el estrés acumulado. Pero no. El oso seguía moviéndose de lado a lado.

-Jude, Axel ¿qué hacéis aquí? ¿habéis venido a ayudarnos? —preguntó entusiasmado Arion Sherwinds

Ambos soltaron un breve suspiro.

La mirada del pequeño se posó en la rubia que estaba con ello.

Los dos jugadores, ahora entrenadores, se miraron a los ojos esperando a que alguno se animara a hablar. Y fue Axel quién dió el paso

-Hemos venido a deciros que este camino es vuestro y que podéis hacerlo vosotros solos. —ignorando por completo la cara de duda que tenían los jugadores mirando a la chica que estaba con ellos—Tendréis nuestra ayuda siempre que la necesitéis, pero no os acompañaremos en los viajes que haréis.

¿En vuestros viajes?

Algo olía muy raro aquí y ella tenía que descubrirlo.

Y para su sorpresa, sería más difícil de lo que pensaba.

-Chicos, mi nombre es Bella. Soy una agente de la Organización Mundial de Fútbol y me aseguraré de que no os pase nada, pero no podéis ir sin la supervisión de un adulto

No tenía ni idea de lo que estaba hablando, pero hacer parecer que si era el mejor plan para averiguarlo sin la necesidad de hacer mayor esfuerzo.

-Encantado, Bella. Mi nombre es Clark Von Wunderbar, más conocido como Wonderbot y puedo asegurarte que los chicos estarán totalmente a salvo y bajo mi protección— habló mirando hacia atrás, observando los gestos que Axel y Jude le estaban haciendo por detrás de la agente— Y creo que deberíamos irnos ya, ¿verdad chicos?

El oso se puso nervioso y con una risa nerviosa intentó escapar.

Pero Bella fue más rápido y lo cogió de los hombros para acercarlo a ella.

-Alto ahí oso...

-Eh ¿A quien llamas oso?

El oso azul se escapó de su agarre para encararla.

-Es que a Wonderbot no le gusta que le llamen así— apareció en escena un chico con el pelo verde

Bella miró la situación sin saber muy bien qué es lo que estaba pasando.

No podía amenazarlos, al final eran niños.

Pero tampoco podía amenazar a los adultos delante de los niños.

FUERZA Y PODER {Axel Blaze}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora