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El lunes había llegado en un santiamén y Clara ya se encontraba en la casa de Julián preparando el desayuno. El le había comentado que hoy no tendría que levantarse muy temprano porque tenía partido por la noche, pero que igualmente se iba a levantar temprano por un motivo en especial que iba a contarle en el momento.

Un Julian adormilado pero vestido como para salir se hizo presente en la cocina sentandose en un taburete y dejando caer su torso sobre la barra.

-te diría buen día pero no parece ser buen día-bromeó y Julian se río.

-buen día clari, perdón, ayer me quedé despierto hasta tarde y tengo mucho sueño.

-y porque no dormís? tenes partido hoy, tenes que estar descansando.

-hoy viene mi familia, deben estar por llegar y los tengo que ir a buscar-explicó- era eso lo que te tenía que contar, que las comidas se van a multiplicar por esta semana, perdón que te avise recién.

-tranquilo, cuantos son?.

-mis dos papás, mis dos hermanos y Carolina, la mujer de uno de ellos, en total seriamos 6.

-genial, alguno tiene una dieta especial?- Julian negó.

-ellos si tienen paladar de adulto, a ellos les podes hacer cosas más pro si queres- la hizo reír- porque si le venis con las comidas que me haces a mi, mi hermano me mata.

-esta bien, algo que sepas desde ya que no les gusta?- el negó.

-cuando lleguen habla con mi mamá, ella es la jefa- ambos sonrieron- ah y te quería pedir un favor más.

-decime.

-esta semana que están ellos te podes quedar tipo todo el día? porque yo la mayoría del tiempo no estoy para atenderlos y como vos sos la que maneja la cocina.

-obvio, si, sin problemas.

-posta? gracias, igual te voy a pagar más no se, eso lo arregla Matias mi contador pero voy a aumentar tu sueldo.

-no es necesario, tranqui, con lo que me das me alcanza y me sobra.

-no importa clari, te estoy pidiendo que cocines para 5 personas mas y qué encima te quedes a atenderlos, es tu trabajo no lo regales.

-esta bien, cuándo llegan?.

-ya tengo que ir para el aeropuerto.

-vendrán con hambre? no importa, voy a cocinarles algo por las dudas- se auto respondió haciendo reír a Julian.

-en un rato vuelvo, disfruta este momento de paz que llega la caravana- ella se río y Julian se fue comiendo un abocado toast.

Clara cocino como si de un banquete se tratase, se agradeció mutuamente por haber guardado distintas masas y demás en el frezer porque solo le quedaba hacer algunos rellenos y nada. Cuando terminó con todo decidió preparar y armarlo todo en la mesa del comedor.

-gracias- escuchó la voz de Julian entrar a la cocina- sos una genia como hiciste todo eso en una hora?.

-después te paso tips- le guiño un ojo haciéndolo reír.

-vos debes ser Clara!- entro una mujer rubia muy carismática-soy Mariana la mamá de Julian.

-un gusto conocerla señora Alvarez- la saludo con respeto y Julian se le río.

-tutéame querida.

-perdón, es la costumbre, Julian me hizo lo mismo- ella sonrió.

-veni que te presento con los otros- Clara no tuvo opción de negarse porque Mariana la tomo del brazo y la llevo hasta el comedor donde ella quiso reír al ver como el papá y los hermanos de Julian degustaban sus platillos-ella es Clara, la cocinera de Julian- los tres hombres tragaron y la otra chica que Clara dedujo la cuñada de Julian se río.

-un gusto, soy Gustavo, el papá de Julian, el es Rafael y su mujer Carolina y el es Agustin, el pobre solterón- todos rieron.

-Julian también esta soltero!- se atajo rápidamente.

-tenes razón, bueno, un gusto conocerte Clara,

-el gusto es todo mío, Julian ya me contó de ustedes y quiero decirles que cualquier cosa que necesiten me avisen esta semana me voy a quedar acá para lo que necesiten así que cualquier cosa voy a estar en la cocina.

-gracias querida- le dijo Mariana.

-pero no se abusen, más que nada vos Agustin- lo señaló Julian riéndose.

-déjalo, enserio cualquier cosa que necesiten solo avísenme, soy de Argentina así que si prefieren platillos de allá díganme, con permiso- Clara volvió a la cocina y se puso a ordenar lo que había usado mientras tomaba un café que le había quedado por la mitad.

-Mariana, perdóname que te moleste, vendrías un segundo?- la mujer asintió yendo a la cocina con ella.

-que paso?.

-es que Julian no tiene mucha idea de la vida y me dijo que hable con vos, hay algo que no coman, alguna dieta a corresponder, algún alimento al que sean alérgicos, algo que deba saber?.

-no querida, al menos que no sepamos- se río-cualquier cosa va a estar bien, vos cocina lo que te parezca y bueno creo que con Julian tenes su dieta.

-así es, muchas gracias, ya te dejo- la mujer volvió y a la vez entro Julian con platos sucios del desayuno-ay boludo, avísame y los junto yo.

-sos mi cocinera no mi mucama- la reto-ya hablaste con mi vieja?.

-si, me dejo el camino libre-ella sonrió-vos queres que te haga las croquetas que te gustan más pollo con fideo y brócoli?.

-eso está más que perfecto, gracias.

-no me agradezcas por cada cosa que haga, bobo.

-es ser educado, igual que vos con mi mamá- recordó riéndose haciéndola rodar sus ojos.

-terminaste? tengo comensales a los que deslumbrar.

-quédate tranquila de eso que ya bastante deslumbrados quedaron con solo el desayuno.

-me alegro, les gusta el flan? puedo hacer uno para el postre.

-hace lo que se te ocurra clari, ya te dijo mi vieja, tenes el camino libre.

-esta bien, vos a que hora te vas?.

-a eso de las cuatro, el partido es a las ocho.

-ellos van cierto?.

-si, pero van más tarde, la cena va a ser bastante tarde, perdón por eso, a la vuelta te alcanzo hasta tu casa.

-esta bien, gracias.

Mi chef | Julian AlvarezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora