-Te dije que era una buena hora para venir. -Sonrió orgulloso al ver el hermoso atardecer en la playa-
Había pocas personas a esas horas, el ambiente era tranquilo. Shira rió un poco mientras también miraba hacia el horizonte, los colores naranjas y amarillos del cielo eran algo realmente hermoso.
Chifuyu decidió "secuestrarla" un rato. Yuzuha le aseguró que ella cubriría su turno en la cafetería para que no le llamaran la atención. Ese plan fué elaborado meticulosamente por el rubio, un plan que no fallaría.
-¡Mira que hermoso, Chifuyu! -Shira había cambiado totalmente la última semana. Eso es algo que TODOS pudieron notar, un cambio bueno-
Ahora sonreía más, se veía más feliz y tranquila.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Quizás solo necesitaba algo o alguien que volviera a llenar de alegría sus días ¿Y quién mejor para hacer eso que Chifuyu?
La chica bajó de la moto de su novio y corrió a la arena, ni se molestó al sentir el cálido suelo bajo sus pies. Ahora todo se sentía diferente.
De un momento a otro, el peso que estaba sobre su hombro izquierdo desapareció; al girarse, se dió cuenta de que el chico había tomado su mochila para llevarla él. Le ofreció una sonrisa mientras le indicaba que podía caminar mientras tanto.
-Puedes adelantarte, Shir. En un momento voy. -Dejó las mochilas en una toalla sobre la arena y rápidamente fué hacia su vehículo para estacionarse correctamente-
Koteshi le hizo caso y corrió directamente al agua. Le dió vergüenza quitarse la camisa de Chifuyu que traía puesta y quedar solo en bikini, así que decidió entrar así.
El rubio se sentó un momento en la toalla y sus ojos se posaron en la chica que se adentraba poco a poco al mar. Sonrió para sí mismo al notar cómo ella miraba hacia abajo, probablemente teniendo cuidado de no caerse mientras caminaba, el agua le llegaba por las rodillas.
Aún no podía creer que la tenía como novia, era como un jodido sueño hecho realidad. Cuando ella lo llamó con la mano, se apresuró a sacarse la camisa con una mano y ponerse de pie para ir corriendo hacia ella.
La cargó colocando sus brazos en sus caderas. Ella rió y dió un leve grito cuando el chico dió vueltas y la mantuvo cargada junto a él. Dejo un tierno bejo en su estómago cubierto por su camiseta y la bajó haciendo que sus pies tocaran la arena debajo del agua.
-Vamos más allá. -Matsuno tomó su mano con diversión y ella negó- Vamos, no tengas miedo. Agárrate de mí si quieres. -Dijo divertido mientras la jalaba hacia él-
-No es justo, soy más bajita que tú. -Se subió a su espalda mientras se quejaba. El chico solo rió más y se adentró al mar, se detuvo cuando él agua le llegaba por el cuello debido a la nueva queja-. No seas maldito, Chifuyu. Me voy a ahogar.
Este sonrió más ampliamente y giró su rostro para verla.
-Nos ahogariamos juntos ¿No sería lindo? -Acarició las manos de la pelinegra que caían a los lados de su cuello con cariño, dejando un beso en una de ellas-
