Una hermosa pareja de luna superiores tiene aventuras tanto buenas como malas en diferentes universos...
› +18.
› Amor gay.
› Palabras obscenas.
Anime: Kimetsu No Yaiba (Demon slayer).
Personajes:
- Douma.
- Akaza.
-Kokushibo.
- Kaigaku.
- Enmu...
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Era una preciosa tarde, las lunas estuvieron en lo que hace unos segundos fue una reunión. Gracias a la biwa de Nakime, la mayoría de lunas no se encontraban, solamente estaban Daki, Gyutaro, Douma, Akaza, Nakime y Kokushibo.
— Me tengo que ir, procuren no quedarse aquí para siempre. Sean útiles y vayan a hacer sus misiones pendientes, par de vagos.— Dijo Nakime refiriéndose a las 3 superiores, luego de haber dicho eso se había teletransportado a otro lugar, ninguno de los presentes sabía ni tampoco les interesaba.
— Daki, realmente me encanta tu kimono, es muy bello.— Mencionó el rubio con una gran sonrisa en su rostro.
— Muchas gracias, me puse este kimono especialmente para impresionarlo, se lo mucho que le encantan las flores de loto.— Contestó la pelinegra presente, mientras daba una corta vuelta para poder ampliar la vista hacia su komino.
Está acción enojo un poco al pelirosa, pero decidió ignorar aquellos sentimientos, solo quería centrarse en conversar con la superior uno, sin dar una pelea.
— Pues, por un momento creí que era un zombie y- — El pelirosa quiso continuar pero la simple presencia de Daki le causaba enojo.
— ¡Es súper genial! ¡Resalta mucho tu hermoso cuerpo!— Alzó la voz el rubio, se notaban mucho las claras intenciones que él tenía.
— Idiota...— Mencionó el pelirosa en un murmullo para sí mismo.
— ¿‘Hermoso cuerpo’?— Replicó una sorprendida Daki.
— «¿‘Hermoso cuerpo’? ¿En qué mierda estaba pensando Douma como para decir eso?»—Pensó el pelirosa con furia.
— Se re notan tus celos, estás re ardido.— Interrumpió el pelinegro.
— Vete a la mierda, me entenderás cuando dejes de ser un estúpido y solitario soltero.— Dijo la tercera superior mientras despistaba la mirada al suelo.
— Nunca lo experimentaré mientas siga siendo soltero.— Dijo soltando una risa entre dientes.
— ¡Me gusta mucho, el azul te queda espectacular! ¡Estás muy guapa!— Alzó aún más la voz el rubio.
— «Esto es todo me largo.»— Pensó el pelirosa, empezó a caminar hacia la lo que parecía ser la salida, y justamente era la salida.
