"Los lazos del destino sucumben ante él "
Li Shang es un joven empresario heredero de una de las más grandes y exitosas compañías de Corea, la sangre de Alfa corre por sus venas sin embargo nunca ha podido estar con nadie, sufre de impotencia sexual...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Li Shang
Me había obligado a dejar de mirarlo, eso y el golpe de Lyuh en mi hombro me habían hecho reaccionar. Una vez Ghea había terminado de cantar, no había tardado en que todos los empleados comenzarán a murmurar entre ellos.
—¿Qué es tan importante que no puedo escuchar?
Mi voz sonaba tranquila, me había relajado más que nunca aquella noche. Mis ojos se fueron hasta todos en la mesa, sus rostros se veían avergonzados, como si hubiera escuchado algo que no debía de haber hecho.
—Lo siento sr—la risa nerviosa de Bomi se escuchó mientras rascaba parte de su cuello por el nerviosismo—. Es que siempre que salimos a beber hacemos algunos juegos.
Fruncí mi ceño.
—¿Qué clase de juego?
Todos veían a Bomi con cara de asesinos en serie, había soltado algo que ellos no querían que supiera. Quizás, porque no querían que su jefe pensara mal de ellos.
—Competimos a ver quién toma más copas de soju—dijo en un hilo de voz y con su cara casi girada hacia el lado contrario a mí.
Sonrío para mis adentros, no era algo tan grave después de todo. Sin embargo, podía ver cómo todos habían bajado sus cabezas un tanto avergonzados.
—¿A eso le llaman juego?—me cruzo de brazos—. Para mí, es pan comido.
—Si el jefe lo dice, entonces también es tu momento—respondió a su vez Ghea mirando a Thao.
Éste había negado al instante.
—La verdad que no me gusta beber y debo volver solo a casa.
—¡Por favor! Solo serán unas copas—rió el pelirrojo—, además si quedas muy borracho puedes quedarte en mi casa.
—Ya, déjalo tranquilo—protesto Bomi retando a Ghea—. No dejaré que se quede con un loco.
