Capitulo Trece

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Thao Lee

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Thao Lee.

¿Acaso... Mark era un Alfa?

Me levanté lentamente con su ayuda, un quejido de dolor salió de mis labios. Instintivamente mis ojos se fueron a mi pierna, tenía parte del traje rasgado y salía algo de sangre.

—No es nada grave, puede que sientas la pierna algo dormida por la toxina del coral pero se pasará en poco tiempo—sus palabras sonaban sutiles mientras me ayudaba a llegar a un lugar donde sentarme— ¿Crees que puedes caminar un poco más?

Mis compañeros seguían rodeandonos, al parecer todos estaban preocupados. Mire por unos instantes a Lyuh, estaba ocupado hablando por teléfono y se le veía muy nervioso.

—¿Como nos fue en la tarea?—le pregunté directamente a Bomi. Ésta se lanzó a abrazarme.

—No es momento para preguntar eso, pero si tanto te preocupa, lo hicimos bien.

Suspiré con alivio y respondí a su abrazo, alejándome poco después por el dolor de mi pierna.

—Creo que lo mejor será que descanses. Vivo cerca de acá, puedo llevarte ahí y darte algunos tratamientos—dijo Mark mirando de cerca la herida en mi pierna y levantándose con intenciones de llevarme con él.

—Yo puedo hacer eso, no te preocupes—las manos de Mark no habían dejado mi cuerpo aún al escuchar las palabras de alguien a sus espaldas—. Debo hacerme cargo de mis empleados.

El Sr Shang estaba detrás de nosotros con  un semblante completamente serio, su mirada no se apartaba de Mark y de sus manos en mi cintura. No tardé mucho tiempo en comenzar a sentir las feromonas de ambos.

¿Por qué las habían expulsado justo ahora?

—Vaya Shang, hace tiempo que no te veía por aquí. Estás igual de testarudo—ríe Mark aún sin soltarme.

Las feromonas de Mark eran de color blanco, una combinación de trozos de mandarina y bambú.

—¿Ustedes se conocen?—la pregunta salió de mi boca antes de poder detenerme.

EL OLOR DE UN ALFA © (BL-OMEGAVERSE)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora