In bed...

Plump Trees After Winter.

Yanqing x Jing yuan.

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Jing Yuan quería mucho a Yanqing, incluso si no lo decía muy a menudo, se podía denotar en sus acciones.

Y es que yanqing era su luz, una que lo iluminó en un momento de oscuridad, el apareció en su vida, y aún siendo un bebé, trajo con sigo una felicidad que el mismo ya había considerado pérdida hace mucho tiempo.

Incluso si el mismo nunca lo engendro, siempre lo amo como a su propio hijo, el mismo lo crío, le enseño todo lo que pudo y sabia, lo mantuvo, interpretó el papel de padre y madre al mismo tiempo e hizo lo mejor para que a Yanqing nunca le faltara nada y siempre se sintiera bien, incluso dejo que chupara de sus pechos cuando era un bebé, el limpio sus lágrimas, curo sus heridas y se encargó de hacerlo más fuerte, para que algún día, si él le faltara, pudiera cuidarse bien solo.

Pero ahora era el quien sentía que no duraría mucho sin Yanqing, con los años y gracias a las diferentes situaciones de su vida, había desarrollado una dependencia hacia el más joven, ya no se podía imaginar la vida sin el.

Y desde cierto incidente, en el cual Yanqing casi perdió la vida, esta misma dependencia aumento, durante el tiempo de recuperación de Yanqing, lloro a mares y rezo a todos los eones para que Yanqing siguiera viviendo, y lo escucharon, pues el mismo aún seguía ahí.

Y los años pasaron, y aunque permaneció junto a él mucho tiempo, su preocupación por el persistía, se preguntaba, ¿Y si yanqing alguna vez lo dejaba? ¿Que haría si Yanqing encontraba a alguien y se casaba? Yanqing era su vida entera desde hace años, solo se levantaba de la cama a trabajar por el, no quería que se fuera.
Así que siempre que podía, pasaba tiempo con el, le compraba cosas e incluso se esforzaba por cocinarle en las mañanas, aunque al final terminará quemandolo todo y yanqing era el que finalmente hacia la comida para ambos.

Temia no ser suficientemente bueno para su Yanqing, era su niño y el merecía todo, temia no poder hacerlo feliz.

Pero había otra preocupación en su mente, ¿Y si a Yanqing no le gustaba que fuera muy intenso con el? ¿Y si terminaba odiandolo y se iba? Eso le dolería aún más.

Pero trato todo el tiempo de no pensar en eso, solo de criar bien a Yanqing, y su refuerzo dio resultado, pues es mismo creció, y se convirtió en un buen hombre, educado y de buena apariencia, las mujeres ahora lo veían con otros ojos, era popular, ahora era todo un caballero, todo un hombre.

Y eso le aterraba a Jing yuan, ahora estaba a casi un mes de cumplir la mayoría de edad, podría fácilmente conseguir a una buena y linda esposa que hiciera las cosas mejor que el y lo dejaría para siempre ahora, e incluso si lo hacía, no podría intervenir, pues si lo hacía, muy seguramente lo terminaría odiando, no quería eso.

Y durante esa noche de luna llena, y mientras el cielo estaba totalmente despejado, con una lámpara iluminando su rostro, de apariencia aun jovial pece a los años, y mientras cepillaba su pelo largo, pensaba en todo esto, había pasado el tiempo tan rápido, su bebé ya había crecido, y fue tan rápido que nunca se dio cuenta.

Se sentía melancólico, no quería pensar en esa posibilidad, así que mejor trato de pensar en que trataría de cocinar la mañana siguiente, aunque las posibilidades de que se quemaran fueran casi de cien.

Entonces, se abrió la puerta de su dormitorio, era Yanqing.

"General, buenas noches"

Aún le llamaba de esa forma, casi nunca por su nombre, y jamás padre, aunque tampoco es que le haya dicho que le dijera así.