—Adrien Agreste!
Se sentó de sopeton en el sofá, debido al susto que el grito de su amiga le había causado. Miró para todos lados con prisa sin visualizar a su azabache compañera.
—Marinette?
Una furiosa ojiceleste salió con prisa de la habitación, observandolo con evidente molestia. Su desordenado cabello y algo corrido maquillaje, evidenciaba que estaba recien despierta, al igual que él.
—Que sucede? Por qué gritas tan temprano?—Indagó restregando su rostro.
—Tu me quitaste la ropa?—Adrien la observó confundido y frunció el ceño. —No traigo nada debajo del remeron!
—Ese vestido que traías puesto se veía algo incómodo para dormir.—Se excusó, recargando su espalda en el respaldar del sofá con algo de pereza.
—Entonces si me viste desnuda?!—Se acercó a él con fuertes pasos y se cruzó delante suyo con los brazos cruzados.
—No, claro que no! Te llevé a tu habitación y te busqué algo cómodo, luego tú te cambiaste y vaya a saber que pensabas hacer al sacarte hasta la ropa interior.—Marinette alzó sus cejas incrédula y desvió su mirada algo apenada.
—B-bueno, entonces no me viste desnuda?
Adrien alzó sus cejas y apretó sus labios para no soltar una sonrisa divertida.
—N-noo, claro que no.—Desvió su mirada y rascó su nuca con nerviosismo.
—Balbuceaste!
—No, claro que no.—Marinette se lanzó contra él para jalar sus rubios cabellos juguetonamente, logrando solo caer de espaldas al sofá.
Adrien aprovechó la situación y tomó sus brazos con una mano, inmovilizandolos encima de su cabeza. Con su mano libre comenzó a repartir cosquillas en el abdomen de la joven, con cuidado de no levantar su remeron.
—N-noo! Basta! Harás que me haga pipí encima!—Exclamó en medio de risas y forcejeos con sus piernas.
—Disculpate Dupain.—Marinette apretó sus párpados y negó con su cabeza repetidas veces.
—J-jamas!
Adrien aumentó sus cosquillas y sintió las piernas de la azabache apretarse debajo suyo.
—Esta bien, está bien! Lo siento! —Satisfecho, el rubio detuvo sus cosquillas y soltó las muñecas de su amiga, saliendo también de encima suyo.
Marinette lo observó con falsa molestia y se enderezó en el sofá.
—Vuelve a hacer eso y te dejaré sin dientes.—Amenazó, apuntando con su dedo índice.
Adrien rió y corrió con suavidad su mano.
—Ayer no parecias tan agresiva cuando llegamos.
Los ojos de la peliazul se abrieron en grande y con inquietud habló.
—Que hice?
Adrien desvió su mirada con diversión y pasó una mano por su cuello.
—En verdad no te acuerdas de nada?—La azabache hizo un sonido de negación y el Agreste volvió a mirarla. —Puede que el beber te haya alterado un poco.
Marinette adquirió una expresión de susto y se acercó a él con temor.
—Dime que no bese a nadie!
Adrien soltó una leve risa y se cruzó de brazos.
—Buenoooo, casi.
La muchacha dejó caer su cabeza contra el hombro masculino y dejó salir un quejido de su garganta.
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Heart Attack (Adrinette)
Teen FictionElla jamás se había enamorado, lo veía como una perdida de tiempo. Una relación para ella era compartir tu vida con alguien que luego te desecharía o de quién pronto te aburrirías. Si algún día se enamoraba, estaba segura que le daría un ataque al...