Capítulo 15

157 8 1
                                    


El resto de la tarde, mis padres fueron los encargados de relatar todas las travesuras que hacia de pequeña y aun de adolescente, ademas se enfocaron en contar las historias más vergonzosas de mi historial. Para este punto, Elijah me conocía más por lo que le contaban mis padres que por nuestras conversaciones. 

Enzo se la llevo de maravilla con mis padres y también, como queriendo avergonzarse asimismo, contó varias historias bochornosas de su niñez que a veces incluía a Elijah. Por su parte, Elijah se hacia el loco cuando lo mencionaba, pero sé que se divertía por los comentarios que soltaba y las incontables veces que se se reía sin parar. 

Fue una tarde increíble. 

Después de unas horas, mis padres se despidieron de todos y se retiraron invitándonos a cenar el próximo fin de semana. Rosita, un poco sonrojada, se retiro a su habitación después de que Enzo y Elijah le dieran un beso en la mejilla. 

Creo que nunca mi casa había estado tan llena. 

Tan cálida.

Agradecía que la sala comedor tuviera suficiente espacio para todos porque hubiera sido un poco incomodo acomodarse en el piso. Enzo, Kat y Elijah se habían ubicado en el sofá, mientras que Alejandro en una silla individual que hacia juego al sofá. Yo tuve que traer una silla del comedor y la acomode en medio de ellos. 

- Entonces, ¿eres el jefe de mi hermana?- pregunto Alejandro un poco confundido. 

- No es solo el "jefe". -hice comillas con mis dedos. -El es el presidente, dueño, heredero, como quieras decirle de la agencia donde trabajo. 

Mi hermano abrió los ojos como platos. 

- ¿Y cómo llegaron a ... ser amigos?- pregunto sin salir de su sorpresa. 

Mire a Elijah, esperando que contestara, pero vi a su lado que Kat parecía aun mas interesada. 

- Se fue dando después de unas conversaciones que tuvimos por trabajo y también de convivir unos días. - dije mirándolo de cierta manera para que no preguntara mas. 

- Así es. - Me siguió Elijah. 

- Interesante. -dijo Enzo, ocultando una sonrisa. 

Alejandro me miro de cierta manera que sabia que no se había acabado ahí el tema. 

-Una pregunta antes de cerrar el tema. -miro a Elijah. -¿Tus intenciones con mi hermana son de solo amigos? 

Elijah paso saliva. Le había afectado la mirada de mi hermano. 

-Si, los dos lo hemos dejado claro. -busco mi mirada, como pidiendo ayuda. 

- Es cierto marmota, Elijah es un hombre de palabra y hablamos de esto cuando empezamos a hablar de cosas no relacionadas con el trabajo. - Tome su mano y me miro. 

Habían pasado años, pero su instinto sobreprotector seguía vivo. Ademas, note que su mirada había endurecido suficiente para asustar a cualquiera y preguntarme que había pasado todos estos años con el. 

- Creo que lo mejor es que todos vayamos a descansar. -sugirió Enzo. 

Todos asentimos. 

-Si necesitas ayuda con tu hermano para algunos documentos de la residencia no dudes en llamarme, podemos hablar con el abogado de la empresa y si es posible que trabaje en ella. Seria mas sencillo si tiene una propuesta laboral. -Propuso Elijah. 

Lo mire sorprendida, no se me había ocurrido. 

-¿Harías eso?- pregunte sin poder evitarlo. 

Mis ojos se nublaron un poco. 

Virgen a los treintaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora