Teacher Park || SahYo

Nadie se entere

Jihyo y Sana decidieron mantener su relación en secreto, al menos por el momento. Jihyo le advirtió a Sana:

"Delante de los demás, no me mires de esa manera, no suspires, no te sonrojes... Nada que pueda hacer que la gente se dé cuenta."

Sana asintió, aunque le costaba ocultar su felicidad.

En clases, Jihyo se esforzaba por mantener la distancia y la objetividad, pero Sana no podía evitar mirarla de reojo.

Los estudiantes seguían murmurando, pero Jihyo y Sana intentaban mantener la calma y no darles motivos para seguir especulando.

Un día, en el pasillo, Yoon se acercó a Sana y le susurró:

Yoon: Sana, qué pasa entre tú y la profesora Jihyo? Todos están hablando...

Sana: De qué hablas? No hay nada...

Yoon: Vamos, Sana, confía en mí... Te conozco demasiado bien.

Sana dudó por un momento, pero finalmente decidió confiar en su amiga.

Sana: (susurrando) Estamos saliendo, Yoon... Pero por favor, no le digas a nadie.

Yoon abrió los ojos de par en par, sorprendida, pero luego sonrió y abrazó a Sana.

Yoon: Estoy tan feliz por ti. Guardaré tu secreto, prometo.

Sana llegó a la oficina de Jihyo con un ramo de flores, sonriendo nerviosamente.

Jihyo: (sorprendida) Qué es esto, Sana? Estás loca?

Sana: (sonriendo) Solo quería hacer algo especial por ti.

Jihyo: (riendo) Bueno, supongo que es un gesto dulce.

Jihyo tomó las flores y las puso en su escritorio. Luego, miró a Sana con una sonrisa pícara.

Jihyo: (susurrando) Ven conmigo.

Las dos salieron de la oficina y se dirigieron a un salón vacío. Una vez dentro, Jihyo cerró la puerta y se acercó a Sana.

Jihyo: (susurrando) Gracias por las flores. Me encantaron.

Sana: (sonriendo) Me alegra que te gustaran.

Jihyo se inclinó y besó suavemente a Sana. Luego, la abrazó y la acercó más.

Sana se sintió envuelta en los brazos de Jihyo, sintiendo su calor y su amor.

Jihyo y Sana se besaron con más intensidad, sus labios se movían al unísono, explorando cada rincón del otro. La pasión y el deseo se desataban en ese momento.

Sana se sintió abrazada por los brazos de Jihyo, su corazón latía acelerado. Jihyo profundizó el beso, y Sana se dejó llevar por la emoción.

El salón vacío se convirtió en su propio mundo, donde solo existían ellas dos. El tiempo se detuvo, y solo importaba ese momento de pasión y amor.

De repente, Jihyo se separó un poco y miró a Sana a los ojos.

Jihyo: (susurrando) Te amo, Sana.