Lirio de Kalós

Capítulo IX.- De regreso a casa.

Capítulo IX.- De regreso a casa.

Ser la señora de una casa de los ríos era difícil y aún más en una tan grande como es la casa Tully, Lilia había sido preparada 8 años de su vida para ello, para cuando le tocará asumir ese rol, casi 3 años habían pasado desde que Oscar le pidió tomar ese puesto en su ausencia y aún le resultaba difícil tomar decisiones y hacer que las cosas funcionen, si era así para ella quien tenía años de preparación lo sería aún más para la futura señora, quien seguramente provendría de otra casa de los ríos, ella había escuchado a los ancianos en su última reunión.

Las noticias de que el Señor de la casa Tully estaría de vuelta llegaron junto con las noticias de la victoria y con esto la preocupación de que el tomara su deber adecuadamente puesto que en 5 semanas también será su ceremonia de mayoría de edad, el consejo determinó que le enviaran no solo una carta de invitación a la ceremonia a cada casa bajo el mando de la Casa Tully si no que  igualmente enviaran una donde anuncien la búsqueda de una candidata adecuada para ser la esposa de su señor por lo cual cada casa podría presentar a una candidata de su elección para ser presentada, esto no eximia a otras candidatas de la misma casa de poder ser elegidas por lo cual la ceremonia seguramente estaría llena de señoritas buscando ganar la atención del gran señor del tridente.

Esto presentaba otra preocupación para ella, sabía que ese día llegaría en algún momento tal vez fue cuando Oscar tomó su puesto como el señor de agua dulce o tal vez lo supo con la muerte de su prometido el hecho de que algún día ya no tendría nada que hacer en la tierra de los ríos, tal vez con el regreso de Oscar y de la elección de la futura señora de la casa Tully llegaría igualmente la hora de despedirse y regresar a Kalós, tratando de consolarse con la idea pensaba que así podría volver a ver a su amado hermano y hacer las paces con su padre quien le habían informado que cayó enfermo, al parecer Kalós la necesitaba más que la casa Tully.

- Donde debería poner esto mi lady?.- Preguntó una sirvienta mientras señalaba canastos de fruta y vino, sacándola de sus pensamientos.

- Por aquí y esto otro sobre las mesas del jardín principal.- Empezó a dar orden, no era momento de preocuparse, Oscar y el resto de los caballeros de la casa Tully estaban de regreso y se debería festejar su regreso de la batalla y la victoria de esta adecuadamente, por las costumbres de la casa el festejo de la victoria debía terminar hasta el amanecer, la razón era simple "mirar el amanecer con tu familia a la que volvías a ver, con tus queridos aliados y amigos o con tu persona amada" cual fuera de todos ellos el objetivo era ver un nuevo día con las personas que llenan de gozo tu corazón.

Al terminar los preparativos, las damas se preparan para recibir de vuelta a su amado, las mujeres casadas están a la espera de sus esposos, las madres esperan ver de regreso a sus hijos, los niños esperan por sus padres o sus hermanos.

Lilia no era la excepción, extrañaba a Oscar tanto como lo hacía con su hermano, tal vez aún más después de todo Oscar formó parte de su vida lo últimos 10 años y de su hermano mayor del cual ella no sabia nada mas que lo poco que él le contaba en sus cartas y no había visto su rostro desde hacía 10 años.

No sabia si ponerse lo que uso los últimos 2 años al ser regente o si debería regresar a su vestidos más coloridos y vivos, optó por la segunda opción y usó un vestido azul cielo combinado con blanco y bordados color plata y con detalles de pequeñas perlas, el vestido lucía modesto comparado con los otros pero resaltaba la belleza del usuario.

Oscar cumplió con su promesa y regreso con vida, tenía que premiarlo con algo, ella siempre supo que él volvería sano y salvo de esa guerra por lo cual le preparó un regalo desde hacía mucho tiempo o mejor dicho lo empezó hace mucho tiempo, le ponía nerviosa saber si le gustaría o no, Oscar es una persona amable así que aun si algún regalo no le gustaba solía fingir que sí y pasaron 2 años desde la última vez que lo vio por lo cual él y su personalidad pudieron tener cambios significativos. El regalo no era su única preocupación, le preocupa no haber hecho un buen trabajo para mantener como debía el castillo de los Tully y sus tierras, la mayoría de los asuntos políticos los llevo el consejo por lo cual ella se podía librar de esa carga, sabia que había hecho lo mejor posible y que nunca había dejado de esforzarse pero eso no le quitaba ningún peso de encima.

De nuevo estaba perdida en sus pensamientos y preocupaciones hasta que el sonido de las campanas anunciando la llegada del señor de la casa Tully y sus caballeros resonó por todo el castillo y el pueblo.

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La historia tiene cierta estética por si no es notorio y me justaría compartirles como son los personajes en mi imaginación pero me preocupa cambiarles la idea que ya tiene sobre ellos.