𝐄𝐧𝐝 𝐎𝐟 𝐇𝐞𝐥𝐥 |𝐂𝐇𝐀𝐍𝐆𝐋𝐈𝐗|

8. Hice Algo al Respecto

Felix estaba dormido cuando escuchó su nombre, asustándolo como el infierno. Se habría caído de su silla si no hubiera arrojado los brazos y se hubiera aferrado al borde de la mesa con su vida. Miró frenéticamente alrededor de la habitación.

―¿Qué? ¿¿Qué pasó? ¿Quién murió?

― Nadie murió. ― Dijo Changbin con una risa. Su compañero se recostó en su silla y sacudió la cabeza divertido. ― Lo siento, no quise asustarte. Quería decirte que te fueras a casa.

Felix miró su reloj. ― Las horas de oficina aún no han terminado.

― Novato, no hay tiempo para detenerse aquí. Está bien, te lo mereces. Ha sido una semana infernal. Recon está buscando el paradero de Lloyd Everton, pero el tipo ha cubierto muy bien sus huellas. Todavía estamos esperando que el laboratorio nos informe de los resultados, pero están teniendo dificultades para encontrar algo que pueda darnos una pista. Terminaré los informes. Vete a casa, duerme un poco. Si tenemos algo, lo llamaré.

Felix lo miró con recelo. ¿Fue eso un truco? Changbin todavía tenía una venganza que dar después de que Felix había obligado a su hermano inocente a desactivar todas las herramientas de audio de la mesa de Changbin, a excepto los altavoces, cuando por accidente activó la reproducción de la pequeña nota de amor de Felix. Al día siguiente, Felix había entrado en el Departamento de Defensa con una ovación de pie, por la gran irritación de Changbin. Felix era oficialmente uno de ellos. Su sensación de victoria, sin embargo, había sido de corta duración mientras se sentaba en su escritorio y su compañero le informaba rápidamente de su muerte inminente. O Changbin lo había olvidado todo, o estaba esperando el momento adecuado. A Felix no le gustó ni un poco.

― ¿Estás ofreciendo hacer los informes? ¿Vas a escribir algo realmente ofensivo y luego firmar mi nombre? ¿Es eso lo que va a pasar? ¿O dibujar penes por toda la página? ― Eso es lo que haría.

Changbin dio un suspiro muy atractivo. ―Porque voy a arriesgarme a una acción disciplinaria por una broma. No hay motivos ocultos, Felix. Odio los informes, pero puedo manejarlo por una noche. Adelante, fuera.

Felix no tuvo que esperar para ser enviado de nuevo. Se puso de pie y se estiró. ―Bien. Gracias, hombre. Con un bostezo, se dirigió al vestuario de hombres, saludando a sus compañeros agentes de defensa mientras pasaba.

Estaba muy cansado. Todos los días de esta semana se apresuraba, conducía de un extremo a otro de la ciudad, comía en BearCat y dormía por turnos. Recon había puesto a trabajar a sus informantes, pero a pesar de todas las pistas útiles, había docenas de falsas alarmas. Los medios de comunicación los estaban masacrando, apareciendo en varios lugares, provocando al público ya enojado. Cada vez que un reportero reconocía a Felix, él o ella mencionaba el juicio de Mark. Fue agotador.

Entre los textos explicativos, Felix todavía tenía entrenamiento, incluidas sesiones de lucha con todos sus compañeros de equipo excepto Minhyuck, afortunadamente. Changbin parecía reacio a enviarlos juntos a la colchoneta. Felix no podía decir que estaba decepcionado.

Luego hubo horas de levantamiento de pesas, cinta de correr, correr, natación, boxeo y yoga, seguidas de

horas de informes para archivar. Se sorprendió de no tener que completar un informe cada vez que tenía una llamada de mierda. Si su equipo recibiera otra llamada de un chiflado que afirmaba que él era el asesino Humano Therians, Felix ... Ni siquiera sabía lo que haría aparte de desearle mil muertes dolorosas. Su cerebro estaba demasiado cansado para funcionar. Todo lo que quería era llegar a casa y colapsar.

Las duchas y el vestuario estaban vacíos con todos todavía ocupados trabajando en el campo o en sus oficinas. Changbin tenía razón en una cosa, ciertamente había sido una primera semana infernal. Él había comenzado difícil, pero cuando pensó en los últimos días, ya se encontraba sonriendo. Le gustaba su nuevo equipo. Estaban lejos de ser perfectos, pero eran un buen grupo, y poco a poco estaba empezando a ganarse su confianza, ayudándoles a entender que estaba bien seguir viviendo sin su compañero abatido. Minhyuck todavía era un idiota, pero no había mencionado la relación de Felix ni nada personal que llegara a un punto delicado. Pensó que Changbin tenía algo que ver con eso. El problema era que estaban esperando permiso, permiso que debe haber venido de su líder de equipo.