Can You Love Me Again? [/Peter Pan/]

La Reina de Cristal

─No puedo ¿entiendes? no puedo─ gritó Emma lanzando el mapa al suelo.

Regina la miró inquisitiva.

─Eres la única que puedo hacer esto Emma─ contesto.

David se acercó a su hija poniéndole una mano sobre su hombro.

─Yo creo en ti.

─Mi hijo...─comenzó a Regina.

─Nuestro hijo Regina, nuestro hijo.─ le cortó Emma.

La aludida giró los ojos.─ Nuestro hijo está en peligro, ahora si no puedes hacer esto, las cosas comenzarán a calentarse un poco por aquí.

─Suficiente Regina─ dijo Mary Margaret.

La susodicha se giró y encaró a la madre de Emma.─ ¿Quieres que comience contigo princesita?

─No amenaces a mi esposa, bruja. ─ Se interpuso David.

─Yo no soy una bruja─ gritó ésta.

─Ya basta.─ exclamó Garfio.

El silencio afloró. Todos lo miraban sorprendidos, nadie pareció percatarse de su presencia antes, debido a que había estado muy pensativo sentado sobre un tronco cerca del campamento.

─Tal vez haya otra manera de negociar con Pan.

─ ¿Negociar?─ cuestionó Regina.

Garfio la miró alzando una ceja.

─Bueno, tal vez negociar no es la palabra adecuada, pero podemos encontrar a alguien que nos ayude a tratar con él.

─ ¿Enserio?

Emma lo miró expectante.

─La única persona que ha podido hacer entrar en razón a Pan─ continuó Garfio.

─ ¿Su madre?─ preguntó Mary Margaret.

El muchacho negó con la cabeza para luego mirar a la mujer esbozando una sonrisa socarrona.

── ¿Me creerías si te digo que Pan alguna vez estuvo enamorado?

─Sinceramente no.─ respondió ella.─ Es tan despiadado, que parece no poseer la capacidad de amar a alguien más.

Garfio comenzó a caminar por los alrededores con suma parsimonia.

─Pues créelo, amor. El muchacho se enamoró una vez.

David le dirigió una mirada furtiva.

─ ¿De quién?─ cuestionó Emma.

─La reina de Cristal.

Regino soltó una carcajada.

─¿La reina de Cristal? ¿De dónde es ella, Cristalandia?

Garfio fijo su mirada en ella.

─Aladris.

La risa de Regina cesó.

─¿Aladris? ¿Eso existe?

Garfio sonrió.

─Al igual que Nuca jamás y el Bosque Encantado, querida.