Una niña rubia
Hay un sonido suave y decadente alrededor.
Hay distintos aromas también.
Puedo identificar un aroma a océano, que luego cambia a otro..., a tierra mojada por la lluvia. Se turnan ambos aromas en consonancia con el sonido suave, como el silbar el viento.
El sonido se desvanece un poco, solo un poco, para luego darle la bienvenida a un aroma a cedro. ¿Porque se desparecen y cambian? Pareciera que soy yo la que me muevo de un lugar a otro, encontrándome con melodías diferentes y aromas diferentes.
Si pudiese elegir mi favorito sería el aroma a petricor y la melodía de suaves violines...
Pero no, los aromas se turnan en medio del vacío oscuro donde estoy y no soy capaz de abrir mis ojos.
«Él tenía razón. Debí ser como él».
«Tenía que ser como él, solo de esa manera no estaría sintiendo lo que siento cada vez que pienso en lo que he perdido».
Yo...
Perdí algo, sí, lo sé.
¿Pero, qué perdí?
El frío golpea mi realidad, pero no logra derribar los muros que he colocado a mí alrededor.
Quiero pensar en alguien, en quien sea, pero la coraza que impide que nada del exterior me lastime hace su trabajo eliminando amenazas.
Quizás me ha visto a mí misma como una amenaza.
Y puede ser que tenga razón. Soy una amenaza incluso para mí misma.
Sin saber cómo o porqué, estoy en una habitación que desconozco, no está muy iluminada, solo veo sofás y creo que una TV encendida, además de eso, hay una hermosa niña rubia jugando a ser Doctora con una mujer joven. Hay una muñeca frente a ella encima de una mesa y por lo que puedo deducir... la muñeca es la enferma. Ellas están jugando...
―Yo creo que no es necesario operar.
―Es fácil, sólo cortamos y sacamos lo malo.
La habitación se disuelve tan pronto como la niña termina la frase.
«Solo cortamos y sacamos lo malo».
¿Sacamos lo malo?
No creo que yo sea una amenaza para mí misma.
Sé muy en el fondo que no controlé algo y que... por eso estoy así.
El frío no me deja pensar con claridad, ni siquiera sé cómo puedo pensar. Debería intentar regresar a mi descanso mental.
La niña rubia vuelve a meterse en mi mente. La veo correr a un bosque no muy poblado de árboles y también... veo a una chica correr detrás de ella. La misma que estaba jugando a las muñecas con ella.
―Espera Mia, yo voy...
―¡No me alcanzas!
―¡Mia! Mia, detente o vas a caerte.
¿Mia?
―Basta. ―La niña, efectivamente, se cae―. ¿Ves? Te lo dije...
Es Mia.
Mia.
La niña es Mia... Mia Browne.
Mi Mia Browne.
Mi mente empieza a trabajar como nunca antes, pero no miedo la fuerza de arranque y solo puedo gritar el nombre de la niña rubia un par de veces hasta quedarme dormida en mi descanso eterno nuevamente.
Mi propia coraza me ha atacado.
De nuevo.
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¡Feliz día del lector GENTEEEeeee!
Quise traer este cap antes de lo normal porque es sumamente corto. Pero preciso.
El siguiente estará más largo, obviamente.
En IG coloco videos promocionales de la Trilogía Arcángel, pueden ir a verlo y dejar su valioso like.
Como dije, les tengo sorpresa, y pronto se las daré.
Voten y comenten muchooooooo.
LOS AMO. <3