~cap.8 "blanco como la luna"~

1 1 0
                                    

Anthony estaba preocupado por su hermano Charlie, no sabía nada de él...
Le pidió a Linus que lo dejara ir para ver a su hermano, este aceptó, pero tenía que darse prisa ya que probablemente su padre quisiera verle y este odiaba a la gente que no era puntual. Anthony no tardaría mucho.
Al llegar pido ver a su hermano recostado en la pared de ladrillos. Su rostro tenía un gesto neutro con los ojos cerrados, como si durmiera profundamente.

–¡Charlie despierta! Traje camisas que te taparán del frío. ¡Vamos! ¡Te encantarán!

Lo zarandeaba delicadamente intentando despertarle.
No se movía... Estaba inmóvil...

–Charlie por favor despierta–

No había respuesta.

–Charlie... No por favor... No...–

Lo zarandeó más fuerte mientras sus ojos se llenaban de lágrimas poco a poco.

–¡Charlie por favor despierta! No... No...

La cara de su hermano tenía una sonrisa dibujada en su frío rostro blanquecino.

Anthony sintiéndose inútil empezó a golpearse mientras rompía a llorar, sollozo tras sollozo. No podía estar muerto... No podía... No lo aceptaría jamás...
Escuchó unas voces que llamaban a Anthony, este las ignoró, no podía reaccionar, estaba en shock.

–Anthony ¿Estás?...–

Linus lo encontró acurrucado junto a su hermano, llorando como nunca antes lo había hecho. Se acercó a los dos y se agachó enfrente de ambos. Intentó consolar a Anthony pero se temía lo peor. Linus no perdió esperanza y le tocó la frente y después la mano izquierda de Charlie. Anthony lo observaba todo extrañado.

Mmm... Anthony, tú hermano está vivo, solo necesita ser llevado a un sitio cálido y descansar. Se pondrá bien.–

Mencionó al joven aliviado. Anthony miró a su hermano y poco después a Linus, podía notar en su mirada lo agradecido que estaba, le abrazó con todas sus fuerzas.

–Podeis quedaros en un cuarto secreto que tengo en mi hogar sin problema hasta que lo necesitéis– sonrió Linus hacia Anthony

Varios minutos después llegaron a la casa, Linus amablemente los llevo hasta su cuarto mientras varias personas les miraban con curiosidad. Al llegar les enseñó un pasadizo secreto dentro de su enorme armario en el que recostaron a Charlie para que pudiera descansar. Anthony estaba realmente agradecido.
Pero aún no conocía a esas personas de nada...

–¿Por qué me estás ayudando?– preguntó Anthony.

El joven Linus parecía de su edad, tenía un nombre que jamás había oído, y su aspecto era extraño, el chico padecía de albinismo, por eso su piel, pelo, pestañas y su aspecto en general era tan exageradamente blanco, por su comportamiento, dedujo que era tímido, compasivo y amable. Esté se sentó junto a Anthony y le miró a los ojos, sin pensarlo dos veces, con mucha seguridad, respondió a su pregunta.

–La bondad es parte de mí, esa necesidad de ayudar a la gente a pesar de ser tan diferente y de lo que he tenido que pasar a lo largo de mi vida. No puedo perdonarme dejar atrás a alguien que de verdad necesita ayuda...–

Se quedó sin palabras. Le lanzó una sonrisa y tímidamente le abrazó.

Anthony había hecho su primer amigo.

The Dead Swans LakeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora