Afrodita la diosa que tenía a tantas personas a sus pies, tanto dioses, diosas o humanos caían ante sus encantos pero ella no les toma importancia.
A la única persona que quiere es a la mayor de las Valkirias Brunhilde, para ella sola y hará lo que...
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Habían pasado unos días desde la mini charla que tuvieron y en esos días el ambiente en todo el Valhalla fue algo...
Pacífico y tranquilo.
Demasiado para el gusto de todo el mundo, sobretodo para ciertas personas.
Zeus se encontraba mirando el cielo sin poder evitar sentir que algo malo pasaría.
Normalmente mandaría a Hermes para que fuera a investigar y le trajera el chisme y así escoger si era divertido para darle una buena pelea...
Pero Hermes se encontraba extraño estos días y parecía que se iba hablar con Apolo y...
Está vez no sentía una emoción, sino miedo y eso era raro...
Ni con su su parte, Cronos, tuvo miedo y él era el dios del tiempo y del espacio.
Zeus estaba cansado de esta situación, como el dios del Olimpo él debía ser el más fuerte de todos...
¡No podía dejar que una mala sensación en el pecho lo dejara con miedo!.
Brunhilde: Zeus-sama...¿Por qué me llamo? -pregunto curiosa y seria.
Zeus: Valkiria... Sé que hemos tenido tropiezos en el pasado... Pero está vez necesito tu ayuda -dijo serio.
Brunhilde: es algo raro pedirle eso a la persona que organizo el Ragnarok y alguien que no es del Panteón Griego.
Zeus: lo sé, lo sé, Pero está vez es serio... Y sinceramente confío más en ti que en mis hermanos o Hermes -dijo serio.
Eso dejo a la peliazul con la boca abierta, no sólo porque Zeus tenía una expresión que decía más que mil palabras sino que...
¿El gran Zeus confiaba más en ella que en sus propios hermanos y mensajero?.
Eso no es algo que se vea todos los días...
Brunhilde: está bien, lo escucho -dijo seria.
Zeus: últimamente siento una sensación rara en el pecho...
Brunhilde:"¿Él también?" -penso sorprendida.
Zeus: después del Ragnarok... Siento que algo malo podría pasar y no me da esa emoción que tanto amo -dijo serio.
Brunhilde se quedó en shock al oír las palabras del mayor, no sabe que es más sorprendente que ambos tengan la misma sensación, excepto que ella lo sentía peor, o saber que alguien que siempre buscaba una batalla para ver si seguía siendo el puto amo no sentía eso y que sentía... Miedo.
No lo dijo pero era más que obvio que eso era a lo que quería decir.
Brunhilde: a decir verdad... También siento que algo malo podría pasar... No con mis hermanos o algo por el estilo... Sino que conmigo, incluso el mismísimo Nostradamus me lo confirmó -dijo seria.
