So High School • T.S

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Cuando llegué a casa, rápidamente busqué mi ordenador para vídeo llamar a Sophia. Ella es mi mejor amiga de California. Estuvimos en la misma clase desde que empezamos la escuela hasta que yo me mude aquí, a Nashville. Por lo que nos hicimos amigas muy rápido, hasta el punto de que lo hacíamos casi todo juntas. Yo me quedaba a dormir a menudo en su casa y ella en la mía, por lo que nuestros padres también se llevaban bien entre ellos. Aunque ahora nos distanciaban bastantes millas, no habíamos perdido el contacto. Cada noche nos escribíamos o hablábamos por facetime y nos poníamos al día. Pero hoy no podía esperar a que llegara la noche, tenía que compartir lo que sentía ahora mismo con ella. Mientras esperaba a que respondiera la llamada, empecé a preparar mi bolsa para el entreno, al que tenía que estar en 15 minutos.

-Hey Amelie, vas temprano hoy.-saludó al otro lado de la línea Sophia.

-Necesito un consejo.-formulé rápidamente.- Tú que tienes novio, ¿cómo supiste que te gustaba? ¿Hay algo particular que sentías cuando estabas cerca de él?

-Um...-pensó unos segundos.- Supongo que supe que Oliver me gustaba porque sentía una conexión especial cuando estaba cerca de él, a demás de que tenía pensamientos repentinos de abrazarlo y besarlo.

-Y cuando lo abrazaste por primera vez, ¿qué sentiste?-pregunté mientras me hacía la coleta.

-¿Para qué esta conversación?-preguntó Sophia sonriendo, pensando de qué se trataba todo.- Bueno, me sentí aliviada, feliz, con mariposas en el estómago. Esas cosas.-respondió, a lo que yo me quedé callada, pensando.- Y cuando digamos que sentí que nuestros cuerpos estaban juntos tal vez sentí la electricidad recorriendo mi cuerpo.  

-Oh no.-susurré yo, pasando las manos por mi cabello.

-¡¿Estás enamorada!?-exclamó Sophia emocionada antes de soltar un grito de emoción.

-¡No!-casi grité yo.- Quiero decir, no lo sé.-aclaré más calmada.

-Ay dios, esto es demasiado importante. Cuéntame de principio a fin.

-Bien, aunque tengo 15 minutos. Tengo entrenamiento.-avisé.

-Tu no vas a pisar ningún gimnasio si no has terminado de explicarme esto, Amelie.-me avisó, a lo que yo reí.

Entonces le conté todo. Desde que conocí a Taylor hasta lo de hace una media hora. Sophia se mostraba muy emocionada al respecto, porque yo nunca había tenido una pareja. A demás, pocas veces me había enamorado de verdad. Pues claro que tenía algún que otro crush, como toda chica adolescente, pero ¿enamorada? Eso eran palabras muy mayores. Como yo fui quien ayudé a Sophia a convertirse en la novia de Oliver, ahora ella estaba casi desesperada en que yo consiguiera un novio. Ella decía que la vida desde que conoció a su novio es mucho mejor, y que no podía esperar a que yo sintiera lo que ella siente. 

-¿Pero es una chica?-preguntó confusa.

-Sí, eso es lo que me extraña, no soy lesbiana. Me gustan los chicos.-respondí mientras me ponía los zapatos.

-Puedes ser bisexual.-señaló.- Solo te recuerdo que cuando vimos Star Wars yo tenía un crush en Anakin y tu en Padmé.

-¡Esque Natalie Portman es demasiado perfecta!-respondí.

-¿Más perfecta que Taylor, para ti?-preguntó sonriente.

-Ey, ¡no te he dicho que me guste Taylor!-respondí frunciendo mis cejas.- Esque no puede gustarme, solo estoy confundida.