【07 𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐】

118 9 6
                                    

Bufó con desgano, ocultando tras sus brazos lo que no quería que vieran, negando con la cabeza cuando sus padres le exigían que les mostrara que escondía con insistencia

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Bufó con desgano, ocultando tras sus brazos lo que no quería que vieran, negando con la cabeza cuando sus padres le exigían que les mostrara que escondía con insistencia.

―Douma, dámelo.― Su madre extendió la mano, mostrando la palma.

―No.―

―Agh, qué niño mimado. Te he dicho mujer que no lo consientas tanto, mira lo que has creado.―Tiró del brazo del rubio y le arrebató lo que llevaba, quedándose atónito.

―¿E-Es un pájaro?―Mascullo la femenina, agachándose para tomar el cuerpo sin vida. Al examinarlo, notó que le faltaban los ojos y su interior estaba vacío. Dejó caer el cadaver y se apoyó en la pared, horrorizada.

―Estás loco, maldito demente. ¿Cómo pudiste hacer algo así? ¡Eres un mal hijo!―El hombre lo abofeteó, haciéndolo caer de golpe.

Lo observó sin ninguna emoción y vio cómo su madre recorría la habitación con entusiasmo, abriendo todos los cajones de los muebles hasta que encontró uno decorado con un arcoíris con dos cajas blancas y abrió la primera.

Se llevó una mano a la cara, tapándose la boca.―N-No, no me digas que de aquí venía este olor tan nauseabundo.―Con miedo abrió la segunda caja, pero la cerró de inmediato al encontrarse con todos los órganos de los cuerpos sin vida de los animales de la primera caja.

―Monstruo, eres un demonio. ¡Has maldecido a la familia!―Lo pateó. El menor se cubrió la cabeza con los brazos, protegiéndose.―Por tu apariencia, creí que eras un enviado de los dioses. No podía estar más equivocado. ¡Estás maldito, Douma!―

Como castigo, esa noche durmió afuera en el porche bajo la tormenta de la fuerte lluvia, solo con una vieja almohada y un pedazo de cartón junto a una manta hecha de harapos. No le molestó, porque una ardilla se le acercó y él pudo entretenerse destrozándole la cabeza con una piedra

 No le molestó, porque una ardilla se le acercó y él pudo entretenerse destrozándole la cabeza con una piedra

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
❝𝐏𝐎𝐋𝐈𝐂𝐑𝐎𝐌𝐎❞ | 𝙰𝚋𝚘𝚖𝚒𝚗𝚊𝚋𝚕𝚎𝚜 𝚘𝚛𝚋𝚎𝚜.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora