Miles de lunas pasaron...[Satoru x Suguru]

Capitulo 7

– Dejaria todo por ti, Satoru.

– ¿Todo?

– Todo.

– Yo dejaria de existir por ti.

Shoko Ieiri

La semana habia sido un tanto abrumadora. Si no fuera por mis juegos de basta o numeros, apuesto que me habria colgado antes de llegar al viernes. Mis mejores amigos tambien eran de cierta ayuda. Si bien casi siempre me enviaban con Haibara o Nanami a exorcizar maldiciones, creo que tambien era una de las suyas. Pero si era honesta, últimamente me sentia como la tercera rueda.

Incluso ayer, cuando estaba por irme a casa y los vi actuando raro, casi podian gritarme al oido que ocurria algo que no iban a contarme. Pero bueno, no iba a quejarme. No puedo ser la favorita de quien yo quiera ¿cierto? Para eso estaba Utahime. La unica amiga con la que sabia, siempre iba a contar.

Pronto se llego el lunes, era de mañana y estaba desvelada por el karaoke al que anoche Utahime y yo asistimos. No voy a mentir, casi la arrastre para esto, y finalmente terminamos un poquito ebrias y dormidas en el corredor de los cuartos.

En fin, tenia un poco de resaca y un chicle de menta en mi bolsillo, caminaba a clase con ganas de morirme, de verdad me habia hecho falta esas horas de sueño. Al caminar me veia a mi misma como una bolsa de basura que se desbordaba a cada paso. No me vuelvo a embriagar en domingo. O tal vez si, pero luego.

– Buenos dias tontos.– Bosteze para tomar asiento, y despues me percate que ninguno me contesto, solo habia una tension que iba del lado derecho de mi mesa al izquierdo, como una cuerda tensa que no me dejaba si quiera sentarme en el medio de ambos.

– ¿Paso algo?

– Ah, perdón Shoko. Buenos dias.– asomo su rostro el pelinegro, quien tenia unas ojeras en las que facilemente podria guardar mis lapices.

– Wow, si que paso algo,– mire al otro lado y me acerque al otro tonto moviendo a un lado su cabello quien rapidamente se alejo mirando a otro lado.– y claro, no van a contarme ¿cierto?

Antes de poder pelear más, Haibara y Nanami llegaron y se sentaron atras como siempre. Senti esos momentos en los que una pareja disfruta estar a solas, asi que tampoco podia apoyarme en ellos para interrogar a los otros berrinchudos. Pronto el profesor Yaga llego y todos guardamos silencio el resto de la clase. Mire de reojo a ambos, Gojo como siempre no prestaba atencion, pero tenia la mirada perdida por la ventana, no estaba haciendo alguna tonteria o mensajeandose con Suguru como normalmente hacen en una clase de relleno. Suguru parecia normal, en lo que cabe. Prestando atención como siempre. Casi contaba los minutos para que la clase acabara y poder enterarme de su mini novela.

Se que ambos creen que soy tonta, pero la vez en la que Gojo hablo de la tal chica que le gusta, era obvio que no era ni una chica, ni eso que "no importa". El solo ver de vez en cuando como el peliblanco se le quedaba viendo a Suguru o su tipo de bromas me hacia evidente ver lo que pasaba del otro lado de sus ojos. Intui que tenia que ver algo con eso.

El receso comenzo tras unas horas largas con Yaga seguidas. Nanami y Haibara parecian haberse esfumado antes de decir una palabra. Los envidio tanto.

– Satoru. ¿Otra vez estas de payaso?

Ninguno reaccionó, no era su madre para arreglar sus problemas. Pero este fin de semana me habian invitado a un concierto, y para no morir en el intento planeaba que este par me acompañara.

– Okey, hagamos esto. ¿Por que no lo hacemos como el aburrido juego de mesa que Satoru tiene?– me meti una paleta a la boca que previamente saque de mi bolsillo.– Adivina quien tiene unas ojeras gigantes que claramente me dicen que algo paso.