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Ye Xin no lo entendía.

¿Qué quería exactamente Bai Xiyin? No estaban tan cerca como para comer juntas en privado.

Además, hoy tenía otros planes.

Así que directamente declinó la invitación de Bai Xiyin: "Tengo algo que hacer al mediodía, así que no iré a la cafetería. Directora Bai, por favor, invite a otra persona".

Los miembros del equipo: "..."

Con la líder del equipo actuando así, sus días futuros podrían ser difíciles.

La directora estaba tan obviamente tratando de ser amigable, sin embargo, ¿ella no aceptó? La vida de Ye Xin parecía girar en torno al trabajo y más trabajo. Normalmente almorzaba en la cafetería, ¿por qué hoy era una excepción?

A fin de cuentas, ¡debía tener algún problema con la Directora Bai!

Los miembros del equipo encogieron el cuello, deseando poder desaparecer en el acto para evitar quedar atrapados en el fuego cruzado.

"Ah, ya veo. De acuerdo, entonces", dijo Bai Xiyin con un tono de pesar, pero no parecía enfadada. Tras una pausa de dos segundos, añadió: "He pedido té de burbujas para todos. Acuérdate de recogerlo en recepción más tarde".

Los miembros del equipo: "..."

¿Quién difundió el rumor de que la Directora Bai era una bruja? Claramente, ¡es una santa!

Ye Xin también se quedó atónita. Tardó un rato en responder: "...Gracias".

Bai Xiyin agitó la mano, se giró con elegancia y se alejó con el sonido de sus tacones.

Entonces, los ojos de todos los miembros del equipo se posaron en Ye Xin, dejándola perpleja. "¿No vais todos a comer?"

Zhou Xiaohan y otros miembros del equipo salieron corriendo.

Ye Xin guardó sus archivos de trabajo, cogió su bolso y salió de la oficina, dirigiéndose directamente al restaurante de enfrente.

"Eh, directora Bai, ¿no es esa la jefa de equipo Ye?". Yan Qing, sentada frente a Bai Xiyin junto a la ventana de la cafetería, giró la cabeza y vio a Ye Xin saliendo del vestíbulo de la empresa.

Bai Xiyin siguió su mirada y vio una figura apresurada.

Acababa de salir del departamento de diseño y se encontró con Yan Qing en el ascensor. Yan Qing la había invitado a comer y ella había aceptado.

Bai Xiyin retiró la mirada, cogió el plato de sopa caliente e inició una conversación: "¿He oído que el jefe de equipo Ye y la jefa de equipo Yan se incorporaron a la empresa más o menos al mismo tiempo?".

"Sí, así es". Yan Qing asintió, metiéndose un trozo de carne salteada en la boca, con la mejilla derecha hinchada como un hámster.

Al ver esto, Bai Xiyin no pudo evitar sonreír.

Tomó un sorbo de la sopa de costilla, se limpió el aceite de la comisura de los labios con una servilleta y luego comió en pequeños y elegantes bocados, lo que la convertía en un placer para la vista.

Yan Qing hizo una pausa, miró su propio plato y, tras un momento de silencio, enderezó la postura y redujo el ritmo de su comida.

Mientras tanto, Ye Xin llegó a la calle donde cenaron ayer. Sacó las fotos que había hecho esa mañana y preguntó al personal del restaurante si conocían a alguien cercano que tuviera un gato. Sin embargo, las respuestas fueron todas negativas.

Con el permiso del dueño del restaurante, colocó la foto del gato y su información de contacto en la entrada, para que el dueño original pudiera verla si pasaba por allí.

Mi Archienemiga Se Convirtió En Gato [GL]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora