Enredados en el Secreto del Amor | GeminiFourth

Capitulo 10 |Celebración Y Despedida

La culminación del proyecto de colaboración entre Gemini y Fourth se celebró en un evento de alfombra roja muy esperado en el centro de convenciones. La noche estaba llena de glamour, con una alfombra roja que desbordaba elegancia y una ceremonia de presentación que mostró el exitoso trabajo realizado por los dos protagonistas.

Gemini y Fourth llegaron al evento por separado, ambos deslumbrantes en sus trajes de gala. La alfombra roja estuvo llena de flashes de cámaras y preguntas de los medios. Gemini, con su esmoquin impecable, y Fourth, con un estilo moderno, destacaron en la escena.

Durante la ceremonia, se proyectó un avance del proyecto, y la audiencia aplaudió entusiasta. Los discursos de agradecimiento de Gemini y Fourth resaltaron su gratitud y el éxito de la colaboración.

La celebración continuó con una fiesta animada. Los invitados disfrutaron de música, cócteles y canapés mientras la pista de baile se llenaba de energía. Gemini y Fourth compartieron algunos momentos juntos en la pista, disfrutando de la compañía de amigos y colegas.

La noche estaba despejada y fresca cuando Gemini y Fourth decidieron celebrar su éxito con una cena especial. Reservaron una mesa en uno de los restaurantes más lujosos de Bangkok, conocido por su exquisita gastronomía y su elegante ambiente.

La mesa estaba adornada con velas y flores, creando una atmósfera íntima y sofisticada. La conversación entre Gemini y Fourth fluía con naturalidad, cada uno disfrutando de la compañía del otro después de semanas de estrés y tensión.

–Nunca pensé que llegaría este momento –dijo Fourth, mirando a Gemini con una sonrisa de satisfacción–. Todo salió perfecto.

–Lo hizo –respondió Gemini, tomando la mano de Fourth sobre la mesa–. Y no podría haberlo hecho sin ti.

Ambos compartieron una cena exquisita, probando platos elaborados con la más alta calidad de ingredientes. El vino estaba servido, y a medida que las copas se vaciaban, la conversación se volvía cada vez más cercana y personal.

Después de la cena, Gemini y Fourth decidieron continuar la celebración en un hotel de cinco estrellas que se alzaba cerca. El hotel ofrecía una suite exclusiva, conocida por sus lujosas instalaciones y su completa privacidad.

Al llegar a la suite, la atmósfera estaba cargada de una anticipación palpable. La habitación estaba iluminada suavemente por luces tenues, y el ambiente era cálido y acogedor. La vista desde las grandes ventanas mostraba el esplendor de la ciudad iluminada, añadiendo un toque romántico a la noche.

–Esto es increíble –dijo Fourth, admirando el lujo de la suite–. Pero lo que realmente hace que esta noche sea especial eres tú.

Gemini sonrió y se acercó a Fourth, tomando su mano y guiándolo hacia el área de descanso. La tensión acumulada durante semanas parecía desvanecerse en el aire. Sin palabras, ambos comenzaron a desvestirse lentamente, cada movimiento cargado de deseo y anticipación.

La pasión entre ellos se encendió rápidamente, sus cuerpos deseosos de experimentar el placer y la conexión que habían estado reprimiendo. Los besos eran intensos y demandantes, llenos de una necesidad urgente que se había acumulado durante todo el tiempo que habían pasado juntos.

–Gemini... –murmuró Fourth, sus labios rozando los de Gemini mientras sus manos exploraban su cuerpo con ternura y ansia.

–Sí, Fourth –respondió Gemini, su voz baja y cargada de deseo–. Quiero sentir cada parte de ti.

Gemini lo empujó suavemente hacia la cama, sus manos explorando cada línea y curva del cuerpo de Fourth con una mezcla de urgencia y adoración. Los dedos de Gemini trazaron lentamente el contorno del pecho de Fourth, bajando por su abdomen firme, sintiendo la tensión de sus músculos bajo su toque. Fourth respiró entrecortadamente, sus ojos fijos en los de Gemini mientras la electricidad entre ellos crecía.

Gemini bajó sus labios al cuello de Fourth, dejando un rastro de besos ardientes mientras sus manos bajaban más, deslizándose por su cintura y bajando lentamente. Fourth gimió suavemente, arqueando su espalda en respuesta al toque experto de Gemini. La fricción de sus cuerpos desnudos se intensificó a medida que sus movimientos se volvían más urgentes, más demandantes.

–No puedo esperar más –susurró Fourth, su voz llena de deseo.

Gemini respondió con un gruñido bajo, sus labios capturando los de Fourth en un beso feroz mientras sus manos se movían con más confianza y decisión. Sus dedos exploraron cada rincón del cuerpo de Fourth, bajando lentamente y provocando un gemido profundo de placer.

La conexión entre ellos se volvió más intensa, con Gemini tomando el control, guiando a Fourth hacia un éxtasis que parecía interminable. Los susurros se convirtieron en gemidos y luego en jadeos mientras se movían juntos, sus cuerpos en perfecta sincronización. El placer creció, alimentado por la pasión reprimida que ambos habían guardado durante tanto tiempo.

Gemini, con una firmeza decidida, deslizó sus manos por la espalda de Fourth, trazando cada vértebra con una lentitud deliberada que hizo que Fourth se estremeciera bajo su toque. El contacto de piel con piel era electrizante, y el ritmo de sus cuerpos se intensificó, volviéndose más frenético, más urgente. Gemini se inclinó sobre Fourth, sus labios rozando el lóbulo de su oreja mientras murmuraba con voz ronca.

–Eres mío, Fourth... Solo mío.

Fourth respondió con un gemido ahogado, su cuerpo vibrando de deseo mientras se entregaba completamente a Gemini. La sensación de Gemini dentro de él, moviéndose con un ritmo implacable, lo llevó al borde de la locura. Cada embestida, cada roce, era un torrente de placer que lo hacía perderse más en el éxtasis.

–No te detengas... –suplicó Fourth entre jadeos, sus manos aferrándose a los hombros de Gemini, tirando de él más cerca.

Gemini obedeció, aumentando la intensidad de sus movimientos, sus respiraciones sincronizándose en una melodía de placer compartido. El sudor cubría sus cuerpos, mezclándose mientras se movían al unísono, cada vez más cerca de un clímax inevitable. Gemini inclinó su cabeza hacia atrás, su mandíbula tensa, mientras el placer los arrastraba hacia un abismo sin retorno.

Cuando finalmente llegaron al clímax, sus cuerpos se tensaron en una explosión de sensaciones. Gemini dejó escapar un gruñido profundo, aferrándose a Fourth con fuerza mientras el éxtasis los envolvía. Fourth se estremeció, su cuerpo temblando incontrolablemente bajo el peso del placer que los consumía a ambos. Se quedaron unidos, respirando con dificultad, sus corazones latiendo al mismo ritmo mientras el momento de éxtasis comenzaba a desvanecerse.

Gemini se dejó caer al lado de Fourth, sus cuerpos aún entrelazados, sin querer separarse. Ambos permanecieron en silencio, sus respiraciones lentamente volviendo a la normalidad, mientras la sensación de satisfacción y conexión llenaba la habitación. La noche había sido todo lo que esperaban y más, un reflejo de la intensidad de su relación y de lo que estaban dispuestos a arriesgar por estar juntos.