Imagina Con Jisoo

Críticas

—¿Ahora a dónde iremos? —Se escuchó la voz de Lisa mientras arrojaba su botellita vacía a la basura.

Su mano libre estaba entrelazada con la mía.
Y mi otra mano estaba abrazada al brazo de Jisoo.
Las 3 íbamos caminando por el centro comercial pasando el día lluvioso y comiendo como locas.

—Hay un lugar al que he querido ir, una tienda en específico —Mencioné y ambas me miraron al instante.

—Vamos a donde quieras, mi amor —Jisoo pronunció y rápidamente tiré del brazo de ambas para comenzar casi a correr; ambas soltaron una leve carcajada ante esto.

Un par de minutos después llegamos.
No pude evitar entrar emocionada.
Las chicas venían dentrás de mi con un poco más de calma.

Caminé atravesando las diferentes prendas y me detuve al llegar a la sección de hombres.
Las chicas no dijeron nada, estaban acostumbradas y no les molestaba en lo absoluto mis gustos.

Ya ha pasado un buen tiempo desde que comencé a realizar mis compras en esa sección específica.

No puedo explicar por qué, pero la ropa masculina es demasiado cómoda.
Me hace sentir mejor conmigo misma.
Y eso es lo único que le importa a las chicas.

—¿Les importa si busco un par de cosas?

—Tómate tu tiempo, cariño —Lisa sonrió y tomó el brazo de Jisoo. —Nosotros vamos a esperarte sin problema

Las chicas se alejaron y comenzaron a hablar entre ellas sobre las cosas que le comprarían a su chica para hacerla feliz.
Sin embargo, algo en específico las hizo ponerse alerta.

Algo que las decepcionó y que interrumpió su charla.
Y que instintivamente las puso en modo protector.

Una señora de avanzada edad estaba observando a su pequeña con disgusto.

—No vas a comprar eso, ¿o si? —Se puso de pie a mi lado y trató de quitarme la prenda.

—Oh, aun no lo sé —Confesé. —¿Lo necesitas para alguien? Lo puedes llevar tú —Se lo extendí con una sonrisa.

—Pensaba comprarlo para mi hijo, tiene más o menos tu edad y este es el tipo de ropa que él usa; una chica como tú no debería usar ropa así

Mi corazón se detuvo.
La tristeza comenzó a acumularse en mi.
Mi rostro seguro no ocultaba nada.

—Eres una mujer, deberías dejar crecer un poco más tu cabello, cambiar ese tonto corte y usar ropa más linda

—¿Disculpa? —La miré molesta al ver que removió mi cabello para desordenarlo.

No es la primera vez que escucho ese tipo de comentarios.
Mi cabello es corto, lo suficiente como para que sea un corte catalogado como masculino.
Pero lo que verdaderamente importa es cómo me siento yo.
¿Por qué a alguien le debe importar lo que hago con mi propio cabello?

—Parecer un hombre —Comentó con una sonrisa macabra. —Debes ser más femenina; eres una chica, cariño, así que actúa como tal, usa la ropa necesaria, y si te esfuerzas serás hermosa

Esa fue la gota que derramó el vaso.
Jisoo y Lisa se acercaron a pasos pesados.
Listas para pelear.

—¿Quién se cree que es usted? —Jisoo fue la primera en atacar. —¿Diciéndole a nuestra chica cómo vivir su vida? ¿A usted qué le importa?

—Ustedes son hermosas —La mujer estaba anonadada ante la irreal belleza del par frente a ella. —Podrían esforzarse un poco más que esto —Me señaló con pésimo disimulo.

—Ya cállese —Lisa rodó los ojos. —¿Por qué se interesa en decir este tipo de cosas a nuestra novia? Ella decide su corte y su ropa, no usted

—Pero--

—No —Jisoo estaba más molesta que nunca, hasta yo me asusté un poco. —¿Acaso usted se pondrá esta ropa? ¿Es este su cabello? ¿Es esta su vida? —Hizo una leve pausa. —¿No? Eso pensé —Se cruzó de brazos. —Ella decide qué hacer con su vida y a usted no le tiene por qué importar, ella es perfecta

—No me digan que esto les parece lindo

—Es la chica más sexy que he conocido jamás —Lisa se acercó amenzante. —Y estoy segura que es mil veces más hermosa de lo que usted ha sido en sus sueños

—Es perfecta así y la amaremos sin importar su apariencia —Jisoo agarró a Lisa por detrás. —Amaremos la ropa que use, el corte que tenga en su cabello; incluso amaremos las bragas que use cada noche —La mujer estaba sin palabras. —Ella no necesita seguir sus tontos consejos para ser hermosa, porque ella es única tal y como es y no necesita cambiar

—Y si su pequeño cerebro en esa gran cabezota no lo comprende, más le vale alejarse de nosotras y no volver a abrir su boca —Lisa se acercó de nuevo. —Ella está cómoda en su propia piel y eso es mucho más importante que usar un tonto vestido y tener su cabello largo —Se cruzó de brazos. —Ella no necesita cambiar, mucho menos por gente como usted

—¿Cómo yo? —Comentó indignada.

—Si, ya sabe... Gente infeliz que necesita criticar a otros porque su vida fue un desastre total —Sonrió. —Así que vaya y compre otra camisa para el pobre de su hijo

La mujer se alejó al instante toalmente molesta.
Yo abracé a las chicas al instante, enterrando mi rostro entre sus brazos.

—Muchas gracias

—No debes agradecer~ —Jisoo acarició mi espalda.

—Siempre te vamos a proteger, nadie puede hablarte así e irse como si nada —Lisa me abrazó por detrás, besando mi cuello suavemente.

—Y cada palabra es cierta, eres perfecta cuando eres auténtica; por favor, nunca cambies

—No lo haré —Las miré con una sonrisa. —Y~ me llevaré esta camisa

—Es perfecta para ti

—Ya quiero verte solo con esa camisa~ —Lisa comentó mirándome coqueta y Jisoo le soltó una palmada en la frente.

—Deja de pensar en sexo, Manoban

Reí ante la actitud de las chicas.
Definitivamente tuve mucha suerte al encontrarlas.
Esa tonta señora no debe importarme, no cuando tengo a dos mujeres excepcionales que me aman y lo demuestran cada día sin falta