Sali con Alessandro y nos tomamos un café, charlamos un rato y tal vez si me distrae un poco, me hizo reír y olvidarme por dos horas de mis problemas, luego de pasar ese rato, volvimos a ir a la clínica porque él tenía consultas pendientes, quiso cancelarlas pero sinceramente yo ya quería irme a la casa
Llegamos al estacionamiento de la clínica y Alessandro me abrió la puerta del auto ofreciéndome la mano para ayudarme
-- bueno Blake, la pasé increíble de verdad -- comento sonriendo mostrándome sus hoyuelos
Sonreí mientras un mensaje de mi madre llegaba a mi teléfono, pedía que me fuera a la casa y que quería hablar conmigo
--¿Cuando piensas retomar las terapias?-- indagó en tanto yo levantaba la mirada del teléfono
-- ahora estoy un poco ocupada pero trataré de que sea pronto-- conteste mientras le respondía a mi madre
-- bueno ya me tengo que ir señorita, espero se vuelva a repetir una salida como está-- comento mientras yo le regalaba una sonrisa
Sinceramente no la pase mal, Alessandro es un excelente psicólogo y execelente compañía, todo el rato que estuvimos juntos en verdad la pasé bien, pude relajarme un poco, el se encargo de que los temas no involucran en absoluto mis problemas
Me subí en mi auto y me puse en marcha a la casa, sabia que tenía que enfrentar un problema cuando llegara a la casa ya que me imagino que ya se encargaron de darle la noticia a mi madre de que Víctor y yo tuvimos una pelea en uno de los baños de la universidad
Llegué a la casa y dos camionetas me hicieron fruncir el seño
¿Visitas?
¿Quien carajos estará aquí?
Me baje de mi auto y subí las escaleras entrando a la casa, escuché personas en la cocina pero sinceramente no me aparecía saludar a nadie y mucho menos ser amable
Subí las escaleras sin hacer ruido y al llegar a la puerta de mi cuarto, entre cerrando la puerta
-- Que día de mierda-- solté volteandome y quedándome paralizada al ver a la rubia que estaba acostada en mi cama
Mierda
Una sonrisa se apoderó de mis labios, ella me miraba con su típica sonrisa
--los días de mierda se cierran con broche de oro-- comento levantandose -- y mírame acá-- agrego acercándose a mi -- joder, es que no piensas saludarme-- reclamo sonriendo
Me acerque a ella rodeándola por la cintura y levantandola mientras la abrazaba y ella reía
-- yo también te extrañe guapa-- comento mientras yo la bajaba
-- ¿Que haces aqui Danna?-- indague confundida en tanto me sentaba en la cama y ella hacia lo mismo
-- venga pues tu madre se ha puesto de acuerdo con la mía y pues venimos a pasar unos días acá con vosotros-- comento mientras su teléfono no dejaba de sonar
-- ¿unos días?-- indague y al parecer sonó fatal
-- vaya actitud de mierda como siempre ¿no?--
-- no, perdón, no quise que sonara así-- me disculpé pero ya había cambiado de gesto -- no te molestes Rapunzel -- comenté logrando que tomara la almohada y comenzara a golpearme
Todavía odia que le digan así, así que es un punto para mí, siguió golpeándome pero logré quitarle la almohada buscando sus muñecas logrando inmobilizarla, al notar mi agarre sonrió para al final mirarme
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El Costo De Los Secretos
RandomTodos los secretos salen a la luz, y una vez que lo hacen descubrimos la oscuridad en la que se suma una gran mentira.