Por la mañana siguiente, Eros caminaba tras Awilix, guindola por el bosque, pues la chica seguía enfocada en crear un segundo arco. Durante toda la noche, se quedaron en el bosque, el chico se vio obligado a ayudarla a crear una daga y una lanza con las ramas que habían encontrado, pues la chica se había enfocado en crear una lanza y otro arco, por que, aun que había sido difícil, no se había rendido a encontrar una rama con una curva perfecta, o casi perfecta, para crear un arco.
Al salir del bosque, Citlali fue la primera en correr hacia Eros, abrasándolo y regañándolo por haberse ido.
—Lo vas a asfixiar. —menciono con burla Ander acercándose a ellos.
—¡Le dije que no se fuera! Es peligroso allá afuera, Ander. —menciona ella.,
—Pero estoy bien. Quiero ver a Awilix tratar de escapar, no podía dejarla morir en el bosque. —señalo Eros con algo de burla en su voz mirando a la chica a su lado.
La castaña no se digno ni a mirarlo, lo ignoro por completo, concentrándose en el nudo de la trenzada. Ignorando a los chicos, camino lejos de ellos hasta la cabaña, donde había algo de sombra aun, para sentarse recargándose en la pared.
—¿Qué es lo que hace? —cuestiono Diego.
—Según ella, cualquier cosa que la ayude a salir de aquí. —respondió Eros soltando las dos lanzas que habían tallado durante la noche.
—Yo no creo que quiera escapar. —susurro Citlali. Caminando hacia la chica con pasos firmes y una mirada amenazadora.
—¿Qué? —confuso, el de cabello largo miro hacia la chica que caminaba.
—Ah cierto... —Ander rasco su cabeza. —Anoche llegaron camionetas de la casa trece, trajeron un festín entero con todo tipo de comida que puedas imaginar, Lali esta mas que segura sobre que Awilix es de la casa cero y vino a matarnos, también quiere que lea una carta que llego junto al festín, aun no sabemos que dice dentro, no quiso abrirla hasta que ella llegara.
—¿Por qué esta tan segura de eso?
Antes de que Ander respondieran, lograron escuchar a Citlali casi gritándole a la castaña, quien la ignoraba mientras probaba el arco que ya había terminado. Eros suspiro y se acerco a ambas con Ander y los dos menores tras él.
—Vamos, lee la carta. ¿Te da miedo que te descubramos? —cuestiono Citlali.
—No tendría miedo si fuera real, por que los hubiera matado apenas llegue aquí. —respondió Awilix, volteando a ver a la chica y dejando el arco en sus pies. —Así que, si tanto insistes en que la lea. —tomo la carta y la observo, abrió el sobre y desdoblo la hoja para comenzar a toser falsamente tratando de agudizar su voz, simulando la de un hombre. —"A los siete chicos de la casa Uno. Queridos desterrados, Me dirijo a ustedes en este momento crucial. Me llamo Javier Bustamante, soy gobernante de la casa trece y de todos ustedes.
Desde la llegada de Awilix, hemos notado que su actividad ha aumentado, es por eso que, por parte del jefe del departamento de desterrados, hemos traído este gran festín completamente para ustedes, como un gesto de buena voluntad hacia aquellos que serán parte de nuestro siguiente experimento.
Les aseguro que su estancia en la casa Uno ha sido mas que provechosa. Han demostrado adaptabilidad y resistencia, características especiales para el siguiente paso. Disfruten del festín, pero no se dejen llevar por la complacencia, la verdadera prueba esta por venir"
Awilix soltó una risa mientras hacia la carta una bolita de papel antes de tirarla hacia el suelo, miro a Citlali y asintió levemente con burla.
—¿Esto es lo que me inculpa? ¿Solo por decir mi nombre? —pregunto Awilix mientras acomodaba su cabello. —¿Dónde está el festín?
—Justo atrás de la cabaña. —mencionó Quetzaly. —Ven, sígueme. —la menor comenzó a caminar.
Awilix tomo el arco y camino tras la chica, detrás de la casa había una gran mesa con un mantel blanco y sobre esta, había demasiada comida, mariscos, panes, bebidas, pollo, frutas, grandes plataformas con dulces, La mesa estaba completamente lleno de comida demasiada deliciosa.
—Vaya, si es un festín. —dijo con sorpresa al notar la comida. Se acerco hacia la mesa y tomo algo de ahí sin dar importancia a que era. —con la energía que esto me dará definitivamente saldré de aquí.
Diego, Ander, Eros y Citlaly llegaron a donde las dos chicas estaban.
—¡Wow, es demasiada comida! —Eros se acerco a la mesa, examinando todo lo que había ahí, mientras su boca se hacia agua.
—Lali, no te resistas a esta comida. —hablo Quetzaly con la boca llena de panes.
Diego corrió a su lado, llenándose la boca de mucha comida diferente.
—Les dará dolor de panza, tranquilos chicos. —Awilix alejo a los dos pequeños antes de que metieran algo mas a su boca sin terminar lo que ya tenían dentro. —Lali, se que desconfías de mi, pero serás la primera en morir si no comes, esta comida nos alcanzara para un mes incluso.
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El Desafío De Los Desterrados (Libro 1, 2, 3 y 4)
Science FictionEl mundo esta completamente destruido por guerras y problemas ambientales. México se encuentra bajo un gobierno opresivo de científicos que buscan una manera de revertir todos los problemas del mundo y políticos que mantienen ciegos a las personas c...