Un golpe de suerte | ZeeNuNew

Veintisiete

Zee

Por supuesto, Asher está de vuelta temprano. La única vez que llega temprano a algo, y tenía que ser este momento.

No me muevo y le susurro a NuNew. —Si nos quedamos completamente quietos, puede que no nos vea.

—Zee, ¿qué demonios?

—Ok, eso no ha funcionado—. Suspiro y me vuelvo hacia mi hermano. Cuando esperaba encontrarme con la ira, me encuentro con algo mucho peor. Parece totalmente traicionado.

—Una historia divertida...—, empiezo.

—¿Y el remate es que te estás tirando a mi profesor?

—Te has tirado a mi novio—. Gran argumento, Zee. De verdad.

—Ni siquiera estaban juntos. Y ni siquiera sabía que te habías acostado con él.

—¿Eso lo hace mucho mejor?

—Entonces, ¿qué, esto es una venganza?

—No soy como tú. No me acuesto con gente para hacer enfadar a los demás.

La boca de Asher se abre, pero no sale nada. No puede discutir ese punto conmigo. Hasta que se juntó con Kole, toda su vida consistía en hacer que los demás se frustraran con él. Buscaba peleas, prácticamente rogaba que le dieran un puñetazo en la cara, y todo eso lo hacía sentir mejor sobre la falta de control que tenía en su vida. Desde Kole, se ha asentado un poco más dentro de sí mismo, pero sigue siendo un exaltado. Probablemente siempre lo será.

—¿Entonces qué es esto?—, pregunta.

—Estamos juntos.

—¿Por qué? Él odia a los deportistas, y tú eres la personificación de un deportista. Un profesional.

A mi lado, NuNew cambia su peso de un pie a otro. —Podría irme y dejar que ustedes dos discutan esto solos.

—No, quédate—, decimos Asher y yo al mismo tiempo.

Miro fijamente a mi hermano. —NuNew puede haber tenido algunos prejuicios contra los atletas, pero tiene sus razones, y ninguna de ellas es ninguna de las tuyas…

—Los jugadores de hockey del instituto me rompieron la nariz y me pegaban casi a diario—, dice NuNew.

—¿Así que castigas a todos tus alumnos por cosas que te hicieron unos imbéciles hace treinta años?

NuNew se vuelve hacia mí. —¿Debería ofenderme más que piense que no puedo ser imparcial o que tenga la impresión de que me gradué en el instituto hace treinta años? Discúlpame mientras voy a buscar crema para las arrugas.

Agarro la mano de NuNew y lo atraigo hacia mí. —Mira, Asher, entiendo por qué estás enfadado, y sí, NuNew se equivocó al sacar conclusiones cuando pediste créditos extra, pero te los dio, ¿no? ¿Y no terminaste haciéndolo bien en su clase?

—Oh, ¿así que ahora estás prostituyendo tu culo por mis notas?

—Te has ganado esa nota—, dice NuNew. —Y no me gusta que se insinúe que se me puede comprar.

—¿No es así? No pude entender por qué un día te empeñaste en no darme créditos extra, y luego te das la vuelta y me los ofreces de la nada. ¿Qué se supone que debo pensar?

—Corta el rollo—, digo. —Sabes que eso no es lo que pasó. En resumen, no puedes estar enfadado porque esté saliendo con tu profesor. Te acostaste con Joss y luego pusiste mi trabajo en juego cuando fuiste tras Kole. Esto no es de ninguna manera una venganza, e incluso la idea de que yo haga esto para molestarte debería decirte lo narcisista que es esa línea de pensamiento.