Un sábado en mi casa, en bóxer, tomando cerveza y contestando mensajes que me enviaba Roseanne de que se habia estado sintiendo mal últimamente.
Suspiré. Y di una pasada a las redes sociales, en las historias estaban publicando varias fotografías. Logré ver una publicación de Jennie Kim, y la miré.
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Las mire detenidamente y en una, en el fondo aparecía un cabello demasiado conocido para mí. Era ella. Era Lisa.
Estaba por meterme en el perfil de Jennie y buscar el de Lalisa pero la puerta de mi casa se tocó bruscamente.
Levanté la mirada y camine a la puerta lentamente, no podía creer que a estás horas estuvieran tocando mi puerta.
— Otra vez me recibes en bóxer, Jeon —Refuto Jimin. Yoongi rio mirando el torso de Jungkook y Taehyung solo miraba su teléfono.
Resople y les abrí la puerta. Y al igual que el otro día me obligaron a cambiarme y me llevaron a la discoteca de siempre.
No había traído mi moto, porqué Taehyung trajo su coche. Y cuando estuvimos en la discoteca recorrí la mirada por todo el sector.
En eso reconocí el rostro de Nayeon entre la mayoría y supe que en esa discoteca se estaba celebrando el cumpleaños de Suzy. Me había enterado ayer porqué alcance a escuchar como Jennie se lo comentaba a Lisa en el receso, bajo el árbol.
— Disfruta con mujeres, Jungkook —Dijo Yoongi fumandose un cigarro que traía en su bolsillo. Asenti y me senté en la barra.
— El muy cabrón está enamorado de una universitaria de su mismo salón —Comento Jimin. Ese comentario me puso furioso, porqué si se lo había contado era porqué contaba con su silencio.
— ¿En serio, Jeon? —Pregunto incrédulo Yoongi.— Te creo con la fastidiosa de Lee, ella está buena, o con la hermosa de Irene, aunque ella ya es mía, así que, puede ser con la enfermera. —Dice.
— Te importa una mierda con quién carajos folle o quien demonios me guste, eso no es tu problema —Conteste a la defensiva, Yoongi rio asombrado.
— Tranquilo hermano, solo decía —Respondio. Pedí un vaso de whisky cargado y lo tragué de un bocado.
***
Yoongi estaba bailando con una pelirroja, Taehyung estaba desaparecido y Jimin conversaba por teléfono. Me acerqué a Jimin y él hizo una mueca de preocupación en medio de la llamada.
— Pero, ¿Estás bien? —Dijo él. Con la que estaba conversando supongo que dijo que no, y él se preocupó, lo noté en su mirada y facción.— Ya voy. Espérame.
Me alejé y Jimin colgó la llamada, guardo su teléfono. Me miró haciéndose notar la preocupación en su rostro.
— Tengo un asunto pendiente, Kook —Comenta mientras lo ve apenado. Asiento porqué soy comprensivo.
