𝐄𝐂𝐇𝐎𝐒 𝐎𝐅 𝐓𝐇𝐄 𝐒𝐓𝐎𝐑𝐌

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"Who Is She ? "
I Monster

El aire dentro del refugio era frío y denso, cargado con el peso de todo lo que habíamos perdido. En la penumbra, los rostros de los demás eran apenas visibles, sombras recortadas contra la débil luz de una lámpara improvisada. El edificio que habían elegido para ocultarse estaba en ruinas, pero había algo en su estructura que lo hacía sentir seguro. Las paredes gruesas y las ventanas selladas lo convertían en un santuario dentro del caos.

Me senté en el suelo, rodeada por el grupo que apenas conocía. Era extraño, haber pasado tantos días hablando solo a través de un walkie talkie y ahora estar con ellos en persona. Pavel, Emi, Ximme, Marenka... eran nombres que ya me eran familiares, pero sus presencias físicas me resultaban ajenas, incómodas. Sus miradas contenían una mezcla de curiosidad y cautela.

Me caían bien, eso no podía negarlo. Había algo en ellos que me hacía sentir menos sola en medio de este mundo roto, algo en su forma de hablar, en cómo se cuidaban entre ellos, que me hacía sentir una pequeña chispa de confianza, pero aún no podía confiar del todo. En estos tiempos, confiar en alguien era un lujo que no me podía permitir. Era demasiado pronto para bajar la guardia.
Aun así, Pavel y Emi eran diferentes. Desde las primeras conversaciones por el walkie, sus voces siempre habían sido las más tranquilas, las que más confianza me inspiraban. Ahora, viéndolos en persona, parecían más sólidos, más seguros de sí mismo que los demás. Tal vez porque Pavel y yo teníamos la misma edad y aunque Emi era apenas dos años mayor, había algo en ellos que me hacía sentir un poco más conectada.

—Es raro verte aquí —dijo Pavel, rompiendo el silencio. Su voz grave resonaba como siempre, pero había una carga emocional que antes no percibía—. Después de todo lo que hemos pasado solo hablando por la radio, es como si... —vaciló un momento—, como si estuviera viendo un fantasma.

—Estoy acostumbrada a eso —le respondí, forzando una sonrisa que no sentí de verdad. Mis ojos se movían de una cara a otra, tratando de leer lo que pensaban de mí. Era imposible no sentirme fuera de lugar. Phantom, la chica que había permanecido en las sombras, evitando a todos, incluso a ellos. Pero ahora estaba aquí, en carne y hueso.

Ximme, siempre la más cálida del grupo, se acercó a mí. Se agachó frente a mí, estudiando mi rostro. Había algo tranquilizador en sus ojos. La gente como ella rara vez sobrevivía en este mundo, pero aquí estaba.

—¿Tienes hambre? —preguntó suavemente, sacando un pequeño paquete de comida de su mochila.

—Estoy bien, gracias —le dije, aunque mi estómago estaba vacío. El nudo de ansiedad en mi pecho me impedía siquiera pensar en comer.

La noche se prolongaba mientras compartíamos historias. Ximme hablaba sobre su último enfrentamiento con los Umbros, describiendo cómo se habían refugiado en un túnel de trenes abandonado cuando fueron emboscados. Emi se unía con sus comentarios, haciéndonos reír mientras intentaba hacer que la historia sonara menos terrible de lo que era.

—¿Y tú, Phantom? —preguntó Marenka, con una mirada intensa que me hizo sentir como si estuviera siendo escudriñada—. Nunca hablamos mucho de ti. Siempre te quedabas en las sombras cuando hablábamos por la radio.

El peso de su mirada me paralizó por un momento. No estaba segura de qué contarles, de cuánta verdad debía compartir. Mis manos sudaban mientras las frotaba nerviosamente contra mis piernas.

—No hay mucho que contar —respondí finalmente, intentando mantener la voz firme—. Perdí a todos los que conocía cuando el virus arrasó con todo. Desde entonces, he estado sobreviviendo sola, moviéndome de un lugar a otro, tratando de evitar a los Umbros. No soy especial... solo soy una Esquirla más, como todos ustedes.

The Shattered CoreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora