Dolly no logró pegar ojo aquella noche, podía escuchar a Kamila en la habitación de al lado, o quien fuera aquella impostora. Parecía canturrear algún tipo de canción de cuna, parecía a la que les cantaba su madre cuando eran pequeñas, aunque la letra de canción era diferente, menos aterradora que aquella.
Arrorró mi niña.
Arrorró siempre perfecta.
Ponles a dormir para siempre.
Y los errores se desvanecerán.
Arrorró, arrorró...La voz a al otro lado de la pared sonada cada más extraña y lejana, como si la falsa Kamila estuviera saliendo del dormitorio. Dolly se tapó la cabeza con las sábanas, con el corazón acelerado por el miedo, cuando escuchó un crujido al otro lado de la ventana.
—Es solo el viento —murmuró temblorosa, tratando de convencerse a sí misma.
"Toc, toc."
Unos golpes secos en la puerta le alertaron, y la pequeña dio un respingo y se sentó sobre la cama, aún con la tela cubriendo su cabeza. Tiró despacio de la sábana, hasta que uno de sus ojos quedó al descubierto, y observó con inquietud el portón de madera cerrado.
El viento frío se colaba por la ventana, y los ruidos de las hojas de los árboles meciéndose podrían haberle hecho imaginar aquel ruido. Se quedó en silencio unos segundos, pero nadie llamó a la puerta. Dolly suspiró y asumió que cerrar el ventanal sería la mejor opción, pero cuando giró la cabeza y se propuso hacerlo, se encontró con unos enormes ojos que le acercaban.
Kamila sonrió y se abalanzó sobre ella, atravesando el umbral de la ventana, y se apresuró en usar sus manos para rodear el cuello de Dolly y comenzar a hacer presión, evitando así que gritase.
—Kami... —trató de decir la pequeña, pero aquella chica que tenía la apariencia de su hermana le estranguló aún más fuerte.
—Shhh... Es hora de dormir para siempre.
La fuerza abandonaba los pequeños brazos de Dolly, mientras aquella impostora extendía su sonrisa. La niña comenzó a ver borroso y unas lágrimas dibujaron el contorno de sus ojos, que desbordaban terror. Separó los labios, en un último intento por pedir ayuda, sin embargo, ni el más mínimo sonido salió de ellos. Después, todo quedó a oscuras.
ESTÁS LEYENDO
Los errores de la perfección
Misterio / Suspenso¿Qué sucede cuando la muerte no es el peor destino que puedes encontrar? Sumérgete en este thriller sangriento, repleto de intriga, mentiras y terror. Una tragedia familiar, una casa repleta de secretos y mentiras. Esa es la realidad de la joven Dol...