El almuerzo fue un éxito, Ni-ki estaba feliz y cansado de tanto correr en el jardín, cuando regresaron a la casa luego de la hora del té, prometieron volver a reunirse pronto, Felix aún tenía que conocer a las hermanas de Hyunjin, a las mellizas que justo estaban en casa de su padre, pero al menos conoció a Yeji, quien apareció en el almuerzo siendo muy amable y divertida, adoró a su cachorro desde que lo vio, el pequeño se divirtió jugando a las escondidas con ella.
Felix se había sentido cómodo entre ellos, realmente en familia, algo a lo que podía acostumbrarse, así que también estaba contento cuando regresaron y ansioso por la próxima reunión.
Además de ansioso, Hyunjin aprovechó cada instante que pudo para recordarle discretamente su cita acordada y con solo eso prender la llama en su interior, se miraron y rozaron toda la tarde.
Minho y Jisung no estaban cuando regresaron, estaban viendo algo de su nueva casa. Aún no tenían los papeles ni nada más que un acuerdo con el dueño, pero ellos se veían mudándose a fin de mes.
- ¿Podemos tener patos también? - exclamó Ni-ki corriendo hasta el jardín para abrirle a Clifford.
Se habían extrañado luego de un par de horas alejados, Felix se preparó para un enérgico Clifford intentando tirar todo.
- No Ni-ki, no podemos - respondió Hyunjin riendo, cerrando la puerta.
- Pero son lindos... - siguió el pequeño.
Felix se metió en la cocina, buscando qué podía cocinar, escuchando y preparándose para intervenir.
- Pero no podemos tenerlos - replicó pacientemente Hyunjin.
- ¿Por qué no podemos? Quiero un patito - lloriqueó.
Ni-ki no hacía cantaletas con gritos, Ni-ki lloraba, a veces se hacía oír, a veces solo se apartaba y lloraba, así que cuando sintió el tonito en su voz supo lo que se venía. Hyunjin, quien aún no estaba tan familiarizado con sus mañas, se preocupó notablemente.
Se apoyó en la entrada a la sala y lo vió cargando al cachorro lloroso y abrazándolo tiernamente.
- Oh peque, porque no se puede, no tendrían lugar aquí y no podría ser felices - explicó, su mano acariciando la espalda del menor que sollozaba.
Sabía que era una pelea interna de cansancio y necesidad de seguir, Ni-ki colapsaba y se ponía algo difícil, pero nada que con paciencia no se solucione. Hyunjin estaba siendo paciente y consolándolo. Felix los dejó solos, confiando en que el alfa podía calmarlo.
Y lo hizo perfectamente, veinte minutos después cuando Felix estaba cortando verduras para una sopa, su alfa apareció con la noticia de que Ni-ki estaba dormido en el sofá.
Lo cual era bueno, pero a la vez no, tendrían que despertarlo pronto o no dormiría o amanecería con el sol.
- Tranquilo, Clifford lo despertará en cuanto aprenda a escalar al sofá y por el progreso que lleva, no le falta mucho - aseguró, sacándole una risa - ¿Cómo puedo ayudarte, cariño? No soy muy buen cocinero pero puedo pelar una zanahoria.
Señaló la bolsa de zanahorias y Felix se la extendió.
- Entonces pela cuatro... no, tres zanahorias y córtalas en palitos - indicó, pasando un cuchillo y una tablita.
Hyunjin tomó lo que le pasó y se puso en marcha, el sonido de los vegetales siendo cortados y pelados llenó agradablemente la cocina, jamás había disfrutado algo tan simple como preparar una sopa.
- La pasé bien hoy, tu mamá y tu hermana son muy amables - mencionó arrojando los tomates en la olla.
Se había sentido incluído y había sentido que realmente querían a su hijo en su familia, sentía que podían formar un lazo genuino.
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beach boys | hyunlix
RomanceFelix sabía solo dos cosas del papá de su bebé: que se llamaba Hyunjin y que era el alfa más caliente que un omega soltero de 21 años podría haberse cruzado en una noche de verano. O dónde el omega de 24 años y su cachorro comienzan de cero en un n...